Así, se autoriza la ocupación de los terrenos de dominio público marítimo-terrestre contemplados en la solicitud de autorización presentada, entre los que se encuentran aquellas ocupaciones sobre la superficie de playa de dotación general, sin ánimo lucrativo y que tienen como destino la prestación de un servicio público o dedicado a los usuarios, como pueden ser duchas, fuentes, lavapiés, entarimados de acceso, papeleras, módulos para depósitos de residuos, torres de vigilancia, módulos de aseos general y para discapacitados, botiquines y zonas deportivas, entre otros.
Recordar que este tipo de serivicios comenzaron a ser instalados a mediados del mes de mayo, de manera que muchos ciudadanos aprovecharon ya la Feria de Primaveria y Fiesta del Vino Fino para poder acceder a algunos de estos servicios reseñados, que estuvieron totalmente acondicionados a principios del mes de junio, ya que en El Puerto la temporada estival oficial comienza el día 1, retrasándose en cambio el dispositivo de seguridad y salvamento marítimo al 15 del mismo mes.
Por otro lado, se permiten siete establecimientos expendedores de comidas y bebidas al servicio de la playa, tipo kiosko, con una ocupación de 6,25 metros cuadrados, que se reparten de la siguiente manera: tres en la playa de Valdelagrana, frente a las pasarelas P2, P4 y P8; dos en La Puntilla, junto a las pasarelas P2 y P5, y dos en Santa Catalina, junto al acceso 3 y a la pasarela P7.
De igual manera, el plan de Costas también ofrece la posibilidad de que se puedan ubicar en la playa diez establecimientos expendedores de comidas y bebidas al servicio de la playa, tipo chiringuito, con dimensiones superiores a los 20 metros cuadrados con un máximo de 150 metros cuadrados, para la presente temporada, con carácter desmontable, en tanto se determina para futuras temporadas el título habilitante de ocupación adecuado para este tipo de instalaciones (concesiones, autorizaciones, etc). Igualmente ofrece ya la ubicación para los mismos, siendo uno para la playa de Levante, en la antigua primera bolsa de aparcamientos en el parque metropolitano; cinco en Valdelagrana, junto a la pasarela P1, P4, P6, P8 y P10 y cuatro en Santa Catalina, junto al acceso 1, 4, 5 y 7.
Evidentemente, hay unas condiciones generales que cumplir para que se pueda dar el inicio de la actividad en este tipo de instalaciones. Así, las ocupaciones autorizadas se llevarán a cabo con arreglo a la documentación técnica aportada por el Ayuntamiento, sin que se permita la construcción de obras de fábrica u otras fijas, dentro de la zona de dominio público, siendo las instalaciones fácilmente desmontables.
Además, el régimen de utilización de las mismas será el del servicio al público usuario de la playa, siendo de libre acceso, no pudiendo restringirse el uso, salvo por razones de orden o aforo, no permitiéndose el estacionamiento, aparcamiento ni la circulación de vehículos, las acotaciones de paso público o las casetas de uso particular, cualquiera que sea su destino, ni de guarda o almacén de enseres destinados a servicios de temporada o cualquier otra finalidad. El titular de las instalaciones está obligado a mantenerlas en buen estado, disponiendo de su certificado sanitario y su seguro de accidentes para usuarios.
Arranca el programa ‘Playa para todos’
Cruz Roja, gracias a la iniciativa conjunta que nace también de las concejalías de Bienestar Social y Medio Ambiente, puso en marcha el pasado lunes un nuevo servicio para los ciudadanos. En esta ocasión, y como explica el presidente de la entidad de carácter social, Juan Ruiz-Herrera, y a título de prueba, comenzó a rodar en La Puntilla el programa Playa para todos. Apunta que es atendido por varios voluntarios de Cruz Roja de lunes a viernes, de 11.00 a 14.00 horas, dirigiéndose a las personas mayores y a todas aquellas que necesitan ayuda para poder bañarse en el mar, bien porque tengan problemas de movilidad o enfermedades diversas que se lo impidan de manera independiente. Reconoce Ruiz-Herrera que en esta primera semana ya se han trasladado hasta la playa un gran número de personas que han solicitado el servicio en los vehículos adaptados de Cruz Roja, así como a miembros de diferentes asociaciones. Aunque por el momento este módulo sólo cuenta con una silla anfibia, por lo que los usuarios potenciales deben esperar para poder ir hasta el mar, está previsto ir dotándolo de todos los elementos necesarios para que los usuarios puedan hacer la mejor utilización del mismo con la mayor comodidad. Esta iniciativa, que está teniendo gran acogida, pretende que los residentes del casco antiguo no tengan que desplazarse muy lejos ya que la playa de La Puntilla es la más cercana al centro de la ciudad. Ahora sólo cabe que siga funcionando igual de bien a lo largo de todo el verano, pues es un servicio muy necesario.
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