A pesar de que el concejal de Policía Local y Protección Civil, Carlos Montero, hace un balance nuevamente positivo, destacando la ausencia de incidentes de importancia, el buen funcionamiento del dispositivo organizado y la importante presencia de visitantes y moteros a la ciudad, (aunque se constató menor cantidad el viernes no siendo así durante el sábado, que se completaron las zonas habilitadas como aparcamientos para motocicletas), hay que lamentar que el hospital Santa María del Puerto atendió a un paciente de 32 años tras sufrir una puñalada. Tras ser intervenido, se encontraba en planta y su evolución era favorable.
Por otro lado, la paciente de 43 años que fue trasladada también al hospital tras sufrir una caída de la motocicleta en la que iba de copiloto también se encontraba ayer en planta y su estado no reviste gravedad.
En el turno de noche se produjeron 81 llamadas, 39 de ellas se correspondieron con petición de datos relacionados con controles de motocicletas y ciclomotores. Las actuaciones más graves a las que tuvieron que hacer frente los agentes fueron, desde las once de la noche hasta las cinco de la mañana, una llamada que comunicó conducciones negligentes en la antigua N-IV, que se intervinieron y controlaron, el arrojo de petardos a la calle, música elevada en algunos establecimientos, ruido de motos, incendio en un contenedor o una reyerta en La Pontona.
En los alrededores de este establecimiento de ocio nocturno fue donde se concentró la mayoría de moteros desde bien temprano en la tarde del sábado, siendo muy habitual un botellón improvisado que en ningún momento se intentó evacuar, a pesar de que no es una de las zonas habilitadas por el Ayuntamiento. Además, igual concentración de gente asumió en general el parque Calderón y la salida al semáforo peatonal que conecta este espacio con la plaza de la Herrería. Otros puntos calientes de la marcha fueron Valdelagrana así como la avenida de Europa y la antigua N-IV, a la que se trasladaron las exhibiciones de motos.
Desde las 7.00 horas del sábado a la misma hora de ayer domingo se produjeron sólo una serie de percances y accidentes menores, siendo uno de ellos el choque de un ciclomotor contra un obstáculo fijo en la calle Francisco Javier de Uriarte, la caída de una motocicleta en la avenida Santa María del Mar, el alcance de dos turismos en la gasolinera A2001 y el raspado entre dos motocicletas y un turismo en el Camino del Sarmiento.
También se llevaron a cabo controles preventivos de alcoholemia, realizándose 85 pruebas, de las que 25 resultaron positivas con infracción administrativa (de ellos 23 fueron motoristas), 23 sin llegar al límite permitido y 37 con resultado 0. A lo largo de la jornada del sábado al domingo se atendieron 26 asistencias sanitarias y nuevamente no hubo que lamentar acampadas ilegales en los pinares.
Ambiente sin compras
Otro sector que muestra su resentimiento con el equipo de Gobierno es el de los comerciantes ambulantes, pues entienden que los ingresos no son suficientes, teniendo más responsabilidad el cierre del centro a los moteros que la crisis, y los impuestos demasiado altos. Por ello, al igual que ocurre con los moteros, este año ha sido un botón de muestra para analizar la situación, pero están dispuestos, tras hacer caja, a pensar el dejar de venir a El Puerto y trasladarse a otras localidades donde haya más libertad, pues les guste o no, el motero si no tiene su moto cerca, no se mueve.
Que la tarde del sábado aumentó algo las ventas es un hecho, pero para que su jornada sea buena tienen que tener ventas todo el día, y eso no ocurrió, pues por la mañana el centro estuvo prácticamente solitario, sin apenas portuenses y mucho menos visitantes, una situación que se repitió ayer. Y no están de acuerdo con que los entrenamientos restan visitantes a sus puestos, pues otros años el parque Calderón ha estado lleno, y lo importante, de gente que quería ver y comprar la mercancía.
Por ello algunos no se lo piensan y prefieren traer a El Puerto, donde entienden que también hay mucha competencia desleal, los restos de otras tiendas y no los productos oficiales o buenos, pues son de mayor calidad pero también más caros, “y nos los comemos con papas”, explican. Otros en cambio tienen claro que con los excesivos controles de Policía Local que existen es imposible que exista competencia desleal.
Que el centro se cierre o que la crisis afecta es una razón o no para depende qué comerciantes, pero es una realidad que “este año hay demasiada tranquilidad, hay menos motos, menos salvajadas, pero también menos gente dispuesta a comprar. Necesitamos cubrir gastos pero también tener un aliciente cuando nos vamos”, indican y este año parece que es el que menos hay.
El viernes apenas hubo ventas, por lo decir que abrieron sus puestos para nada, pero el sábado sólo se salvó media jornada y ya ayer volvieron a descender los visitantes, por lo que, la posibilidad de compra también.
Parece ser que ni hosteleros ni vendedores ambulantes están de acuerdo con el sitio del centro, a pesar de que los ciudadanos de a pie agradecen poder descansar, pero en cambio los que viven cerca de la antigua N-IV o en la zona de Valdelagrana aseguran que ellos también sufren el ruido de las motos y los excesos o cabriolas que realizan los moteros, y en cambio el equipo de Gobierno no mira por ellos, por tanto no descartan tener que denunciar por vía judicial estos hechos, pues “o todos moros, o todos cristianos”, explican algunos afectados.
Cierto es que, “ni todo es blanco ni todo es negro. Son sólo unos días así que si sale ganando El Puerto nos tenemos que aguantar todos”, por eso ven con buenos ojos que el Gobierno local vaya tomando ejemplo de la cercana Jerez, que vuelve a abrir algunas calles al tráfico sin que se estén causando problemas o molestias a los vecinos y mucho menos accidentes.
Parece ser que hasta el próximo año, hay muchas cuestiones referentes a la Motorada que habrá que apuntar y debatir, sobre todo el cierre del centro a cal y canto, pues parece ser que lo que para unos es bueno para otros no lo es tanto, y si se trata de que El Puerto se beneficie e incluso comience a verse una leve recuperación de la crisis económica, puede que ésta no sea la mejor medida, según entienden los hosteleros y los comerciantes ambulantes, que reabren el debate de si ésta es o no la mejor decisión. Ahora queda evaluar todos los pros y los contras e ir decidiendo hasta 2011.
Ausencia de la Guardia Civil
El concejal de Policía Local y Protección Civil, Carlos Montero, denuncia que, un año más y pese al compromiso del subdelegado del Gobierno, Sebastián Saucedo, la Guardia Civil no ha tenido presenica en El Puerto y no ha vigilado ni controlado los accesos a la ciudad, un hecho que ocurre por segundo año consecutivo y que supone una nueva dejación de funciones, una falta de compromiso del Gobierno de España con la ciudad y los portuenses. Así, la localidad ha estado desprotegida durante estos días de Motorada, pues los accesos no han estado controlados, siendo una función muy importante para evitar excesos de velocidad, actuaciones indebidas por parte de la gente que viniera de fuera, tanto por Jerez, Cádiz, Rota o Sanlúcar, como para hacer respetar las normativas de circulación en ciudad. Por ello anuncia que este nuevo desplante por parte de la Subdelegación del Gobierno será analizada profundamente por el equipo de Gobierno municipal en los próximos días, con el fin de poder tomar una decisión y pedir las explicaciones oportunas a Sebastián Saucedo.
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