Con Y griega

La utilidad de la campaña electoral

De hecho, no estamos ante una campaña más. Se están produciendo verdaderos hechos significativos que no han de pasar desapercibidos

Publicado: 26/11/2018 ·
21:34
· Actualizado: 26/11/2018 · 21:34
Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
Autor

Antonio Yélamo

Periodista de dilatada trayectoria, Antonio Yélamo es director de Radio Sevilla, en la Cadena Ser

Con Y griega

La actualidad política, social y económica andaluza analizada desde la A a la Y con el sello personal de Antonio Yélamo

VISITAR BLOG

En contra de lo que muchos consideran, la campaña electoral en Andalucía sí está resultando útil. Se da por sentado que cada vez influyen menos en el voto de los ciudadanos dado que ya podrían tener su decisión tomada. Es decir, que eso del grupo de indecisos es una cuestión meramente marginal, sin apenas capacidad de influir en el resultado final. Sin embargo, a tenor de lo que sucede se puede asegurar que todo tiene su valor y quién sabe si su trascendencia definitiva. Desde lo que dicen los diferentes contendientes sobre promesas y sus respectivos programas electorales hasta por sus comportamientos, gestos y cambios de criterio, según convenga. Todo vale y no sólo para configurarnos un juicio más o menos certero sobre lo que suponen y representan sino, también, para determinar hasta dónde son capaces de llegar.

De hecho, no estamos ante una campaña más. Se están produciendo verdaderos hechos significativos que no han de pasar desapercibidos. Si nos fijamos en el tono y las formas, es de  destacar la línea seguida tanto por Susana Díaz como por Teresa Rodríguez. De la primera era de esperar que mantuviera una actitud más guerrera conforme a comicios anteriores. Sin embargo, hasta ahora venía apareciendo sosegada y sin estridencias, conforme a su condición de presidenta de la Junta, lejos de la confrontación cuerpo a cuerpo con el resto de competidores. Más novedad supone, en cambio, la posición de Rodríguez al ofrecer un perfil alternativo y fuera del rol radical que se le podría suponer, como si no quisiera irritar a los votantes socialistas para atraerlos hacia sus tesis. De igual modo, lo tenía difícil Juan Marín, de Ciudadanos. Había dudas sobre cómo iba a compatibilizar su discurso con el hecho de haber permitido la proclamación de Díaz como presidenta. Y, al final, lo hizo sin complejos y con la suficiente contundencia como aparecer como nuevo, sin la sensación de mochila alguna y robándole espacio y protagonismo a su más inmediato competidor, Juan Manuel Moreno, del PP, que bastante tiene con abrirse hueco entre los suyos tras la apabullante presencia de su líder nacional, Pablo Casado.

Por ver, hasta hemos visto a los populares denostar de las autonomías apelando, sin descaro alguno, al trasnochado centralismo reclamando para el Estado las competencias de Educación sin respeto al propio programa electoral del PP andaluz. Un movimiento que no es ajeno a la irrupción de Vox, esa formación que está captando votos por doquier y que está por ver aún hasta dónde llegará.¿Quién ha dicho que las campañas no sirven para nada?

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN