ona comercial reclama atención’ podría ser un slogan de marketing, pero nada más lejos de la realidad, es una de las frases más repetidas por los comerciantes y usuarios de uno de los espacios más visitados de la ciudad en cuanto a oferta comercial se refiere, la avenida del Ejército.
Aunque a simple vista parece que el mantenimiento de la avenida del Ejército no es “de los peores que hay en la ciudad”, sí es cierto que “se puede mejorar, sobre todo teniendo en cuenta que es una zona muy visitada”, explica un comerciante de tienda textil, “algo que hemos notado que ha aumentado este verano”, indican.
Hay alcorques en mal estado, con losetas sueltas o totalmente destrozados, losas del pavimento sueltas o rotas, lo que puede suponer un peligro para los viandantes, pasos de peatones que necesitan un repintado o bordillos destrozados.
También se pueden encontrar varios alcorques sin árboles, que igualmente pueden suponer un problema para los transeúntes, otros tapados en los que se indica que ahí falta un ejemplar, un número escaso de papeleras, contenedores muy espaciados unos de otros, y señales horizontales unas pintadas encima de otras sin que se distingan cuáles son las actuales y cuáles no.
En general, la sensación de comerciantes, residentes y portuenses, es que el equipo de Gobierno formado por PSOE e IU “tiene esta zona abandonada” y falta de “atención”.
“Yo vivo en esta zona y me cuesta entender que no se le preste atención, sobre todo cuando pagamos impuestos como los demás portuenses y es de las más zonas reclamadas, no solo para vivir, sino por parte de los comerciantes. Mucha gente se quiere instalar aquí, porque hay mucha vida y mucha gente viene a pasear por aquí”, pero evidentemente “si no se atienden las necesidades de la avenida y las peticiones o reivindicaciones de los comerciantes, al final terminarán yéndose”, explica Y. L.
Sin duda, los propios comerciantes aseguran que hay otros empresarios interesados en la avenida del Ejército, “porque es muy golosa”, por eso “los que estamos no queremos soltar nuestros locales, pero a veces te dan ganas de tirar tu sueño por la borda porque no nos cuidan”.
Los comerciantes siguen valorando de forma positiva el doble sentido que se le imprimió a esta avenida hace unos años, porque “el hecho de que se pueda entrar y salir por esta avenida hace que esto repercuta en el número de visitantes que tenemos. No es lo mismo poder ir en una dirección que en ambas, y es una mejora con la que hemos acertado” y que agradecen al Ayuntamiento. “Menos mal que nos hicieron caso en algo, aunque poco más han hecho por nosotros”, reclaman.
Eso sí, ahora cuentan con menos plazas de aparcamiento “pero quien conoce la avenida del Ejército sabe que antes contábamos con los mismos aparcamientos que ahora, y siempre nos hemos acostumbrado a lo que había, a aparcar en los alrededores y ya está”, añade un comerciante.
Plaza Miguel del Pino
Otra cosa que valoran no solo los comerciantes sino los residentes de esta zona es el arreglo y mejora de la plaza Miguel del Pino, “que ha costado mucho sudor y muchas quejas, pero ha merecido la pena, porque los niños pueden jugar aquí sin losas sueltas, suelo levantado, ni miedo porque se puedan caer”, dice Carmen G. Para los comerciantes “la mejora de la plaza es un atractivo más, porque antes daba pena que nadie diera una vuelta por la avenida y ahora es un placer, no hay ni punto de comparación”, indica una comerciante cercana a Miguel del Pino.
“Ahora hay vida en esta plaza, y es una alegría ver niños que juegan por aquí sin tener el miedo en el cuerpo porque se puedan caer o tener un accidente”, explica una abuela que lleva a sus nietos a esta plaza a jugar. “Pero sí que podrían cuidar más la avenida, porque es verdad que los que vivimos por aquí la vemos estropeada, sin cuidados, y es una pena”.
En definitiva, los comerciantes solicitan una mejora notable y urgente en la avenida del Ejército, porque la mejora de la imagen de la zona repercutirá en sus comercios, en la predisposición de la gente a acudir a los mismos, y a que se ensalce como zona comercial.
Y los residentes consideran que merecen una zona en la que vivir más cuidada, sin desperfectos, sin peligros en las calles, especialmente para los niños y los mayores, y que atraiga a mayor cantidad de gente, porque sin duda “es un gusto que haya tanto portuense y tanto turista que venga y llene de vida nuestra zona residencial”, ya que eso hace que “se revalorice”.
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