Campo de Gibraltar

El corcho de Tarifa, en los mejores registros de los últimos años

La preservación del monte Ahumada, con diez años de reposo, se nota en la calidad de las panas extraídas, según el ayuntamiento

Publicidad Ai Publicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai
  • Recogida del corcho -

 La cuadrilla de corcheros se traslada a diario a una superficie acotada del monte público Ahumada. La zona extractiva ha sido fijada por los técnicos municipales a no muchos metros del patio (lugar destinado al acúmulo y pesaje).

La actividad extractiva del corcho de los alcornoques ha alcanzado ya su ecuador. Llevan semanas trabajando y los datos son halagüeños. Con un total de 200 mil kilos ya obtenidos se espera alcanzar los 300 mil en las próximas semanas. Cuentan, por cierto, con una balanza digital de nueva adquisición que facilita esta fase final del trabajo. Soporta 300 kilos y sustituye a la tradicional “romana” con la que contaban años atrás. Eso sí, es lo único moderno de esta labor porque el oficio sigue practicándose como hace décadas.

Toda la cuadrilla está compuesta por tarifeños que conocen bien cómo desarrollar esta actividad. Han recibido la enseñanza de un veterano, conocedor del monte público tarifeño como es Cristóbal Gutiérrez. La formación práctica de estos hombres corcheros es fundamental y en ello pone su fijación el Ayuntamiento de Tarifa, a través de la delegación de Patrimonio.

Es preciso que conozcan bien cómo retirar las panas de corcho de los árboles para su preservación. El Parque Natural de los Alcornocales sigue dando sus frutos gracias a una labor extractiva bien desarrollada.

Precisamente en la jornada de ayer, la cuadrilla recibió la visita del concejal de Patrimonio. Fran Terán, quien, junto al técnico Juan Manuel Pérez, quisieron hacer un seguimiento a estos trabajos. Agradecieron a la cuadrilla el afán que ponen en sus labores y el demostrado cariño hacia el medio natural.

Son dos los recogedores y dos los arrieros acompañados de ocho mulas. Están también los cuatro hachas o corcheros, entre ellos el capataz Ismael Gutiérrez, y el pesador. La jornada para ellos es intensa porque comienzan con la luz del día y las pausas las limitan a las horas de la ingesta. Siguen parte de la tarde con un trabajo físico que exige agilidad y fuerza.

El corcho de Tarifa se vende a la empresa extremeña DIAM Corchos. Fue la adjudicataria en un pasado concurso municipal. Se precia la calidad de las panas de corcho por su densidad y baja porosidad.
 

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN