Los números no mienten. Es más que evidente la seguridad defensiva con la que el Recre Portuense se está moviendo en este tramo liguero. Las escasísimas llegadas con las que se mueven los rivales contrarios y los contados errores en la zona de atrás, hacen de los rojiblancos uno de los conjuntos más seguros y más estables de la categoría.
Ni que decir tiene que la facilidad que encontraban sus contrincantes en perforar la meta recreativista se ha ido subsanando según se ha ido consumiendo las jornadas.
Lejos queda cuando el equipo ofrecía momentos seguros con inestables sensaciones. En las últimas jornadas, el Recre ha demostrado que eso es pasado.
En el último mes de competición (seis jornadas), los de Carlos Camacho han encajado un único tanto ante el Chipiona, en el último partido del año.
En el resto, en cinco, los portuenses han saldado sus partidos con la puerta a cero. Un cambio tan evidente como crucial para haber subido hasta la octava plaza, a un punto escaso de colocarse en zona de ascenso directo.
De las 18 jornadas disputadas hasta entonces, en siete de ellas, cinco han sido en las últimas disputadas. Un dato revelador que pone de manifiesto que la mejor versión de estos está llegando en este estreno de la segunda vuelta en la que parece haber encontrado la horma al zapato a un equipo que va a más.
Este domingo se medirá a La Palma en un choque que está previsto dar comienzo el domingo a las 12 del mediodía. Los onubenses vienen de perder ante el Xerez CD por 2-1.
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