A tres días de torear en su tierra, David Galván tuvo este domingo una tarde redonda en Marbella. Cortó las dos orejas del tercero después de una faena variada, con pinceladas de buen gusto y detalles muy toreros ante un animal noble pero de embestida sosa y parada. Otras dos paseó del sexto, con el que se volvió a ver su personalidad y empaque en una faena muy pinturera. Mató de pinchazo y estocada.
A Galván le acompañó en hombros José Carlos Venegas, que cortó un trofeo tras imponerse al encastado que abrió plaza. Llegó con movilidad el toro al último tercio y lo aprovechó el jienense para enjaretar tandas muy buenas sobre la derecha y un final de faena en la corta distancia. Desorejó a su segundo, más apagado, pero con el que de nuevo sacó oficio y actitud en una labor que abrochó en terrenos de cercanías.
Una oreja consiguió Jiménez Fortes del que hizo segundo, ante el que fue volteado de forma aparatosa sufriendo la rotura de la taleguilla. El malagueño, muy firme y templado, logró un par de series con muletazos de uno en uno de mucho mérito ante un astado que desarrolló complicaciones. La espada le privó en el quinto de sumar un nuevo trofeo y abrir la puerta grande, tras una labor de entrega y sometimiento a un toro sin clase.
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