Pizarro reconoció ayer que el acuerdo sobre la deuda histórica “no le ha caido bien a determinados sectores del nacionalismo catalán, que han incrementado su presión” ante la negociación del nuevo modelo de financiación autonómica, aunque quiso advertir al tripartito catalán que esos 1.204 millones no suponen un “acto de privilegio ni de agravia contra ninguna comunidad, sino un acto de justicia constitucional y estatutario”, por lo que si quieren incrementar el dinero que irá para Cataluña “tendrá que darlo para todas las comunidades” y hacer un reparto equitativo y solidario.
Según el dirigente socialista, “no habrá 15 modelos de financiación distintos”, por lo que apostó por esperar a que se conozca la fórmula de reparto y los porcentajes según los criterios de población y otros que se han conocido para negociar. “Y luego al Consejo de Política Fiscal y Financiera”, que será el órgano multilateral donde finalmente se apruebe el nuevo modelo de financiación autonómica, del que no descartó que una comunidad pueda excluirse puesto que Andalucía ya lo hizo una vez con el Gobierno de Felipe González y luego con el de Aznar.
Aprovechó para criticar cómo se está “deslizando” la idea de que como Andalucía ya ha cobrado la deuda histórica se van a perder recursos en la financiación autonómica, reterando que ambos conceptos no tienen nada que ver, y acusando a Javier Arenas, presidente del PP-A, de confundir a la opinión pública con ambos conceptos.
“Yo le pediría a Arenas que no fuera más liante, que no falseara la realidad”, porque lo único que consigue es “debilitar la posición de Andalucía en relación al modelo de financiación, a la negociación bilateral y multilateral”, afirmaba Pizarro para concluir que es “un gran elemento de irresponsabilidad política” trasladar que la deuda histórica tiene que ver con la financiación autonómica “porque todas las comunidades autónomas pueden poner sobre la mesa que ya hemos cobrado cuando no es así”.
Valderas quiere que Chaves no se duerma en los laureles
Por su parte, el coordinador regional de IULV-CA, Diego Valderas, reclamó ayer al presidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, que "no se duerma en los laureles de la raquítica deuda histórica que ha recibido Andalucía, para conformarse con un modelo de financiación que sea discriminatorio con la comunidad".
En rueda de prensa en Huelva, Valderas advirtió que si al final, en el conjunto del Estado, no se alcanza un modelo de financiación solidario "estarán muy en peligro los elementos de dotación presupuestaria para que Andalucía afronte la crisis en las mejores condiciones".
El representante de IU dejó claro que desde su formación no aceptarán "que Andalucía esté un paso por detrás de lo que hoy reclama Cataluña".
En este sentido, indicó que aunque esta comunidad autónoma tiene el derecho a reclamar un modelo de financiación que cubra sus necesidades, "Andalucía tendrá que estar un centímetro por delante en dotación presupuestaria de ese nuevo modelo de financiación, por que éste tiene que tener su pilar fundamental en la solidaridad y ésta hoy ante la necesidad que vive Andalucía exige mucho más recursos para ella".
Valderas considera que "no se puede separar la defensa de ese nuevo modelo de financiación de lo que dice el Estatuto", por ello insistió que Chaves "no puede conformarse con un modelo de financiación que sea discriminatorio con Andalucía y privilegie más a otras comunidades como reclama Cataluña".
"En el modelo de financiación la solidaridad exige que Andalucía esté por delante en recursos y posibilidades financieras porque es la comunidad que más necesita", manifestó.
El coordinador regional de IU reclamó al presidente de la Junta de Andalucía que "no se duerma en los laureles de la raquítica deuda histórica, que ha sido miserable, pues el modelo de financiación no puede serlo también y si es necesario se deberá rechazar e incluso movilizar la ciudadanía para defender el mayor nivel de recursos financieros en el nuevo modelo de financiación".
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