El 69,13 por ciento de los alumnos universitarios andaluces que culmina el doctorado se encuentra un año después trabajando, según el estudio de la situación laboral de las personas egresadas en enseñanzas universitarias en Andalucía realizado por el Servicio Andaluz de Empleo de la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo a través del Observatorio Argos, un sistema de prospección permanente del mercado de trabajo de la región.
Según se ha informado a Europa Press desde la Consejería, el estudio analiza la situación laboral del colectivo al año de la finalización del curso académico en el que se graduaron --entre el 1 de octubre de 2010 y el 30 de septiembre de 2011-- e incluye a las 31.292 personas egresadas en primer y segundo ciclo procedentes de las nueve universidades andaluzas de la promoción 2009-2010, además de los 5.805 egresados en estudios de Postgrado de la misma promoción --4.965 finalizaron un máster oficial y 840 resultaron egresadas en doctorados--.
A 30 de septiembre de 2011, un año después de finalizar el doctorado, el 69,13 por ciento de estas personas se encontraba trabajando. En cuanto a la situación laboral, el 61 por ciento eran asalariados temporales, el 22 por ciento eran asalariados indefinidos, el 3 por ciento pertenecía al funcionariado y casi el 13 por ciento estaba dado de alta en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos.
El estudio señala también que más de la mitad de los contratados (51 por ciento) se dedicaba a la enseñanza universitaria, el 11 por ciento a las actividades hospitalarias y más de 7 por ciento se encontraban trabajando en empresas dedicadas a I+D al año de doctorarse.
En el caso de los alumnos que obtuvieron un título de máster oficial, el 56 por ciento se encontraba trabajando un año después de su culminación. Esta tasa es doce puntos porcentuales superior a la registrada en el colectivo de egresados universitarios de primer y segundo ciclo, que alcanzan al año de finalizar sus estudios un porcentaje de inserción del 43,75 por ciento.
EL 62% DE LOS EGRESADOS, MUJERES
El informe desarrollado por el SAE analiza en profundidad la situación de los titulados universitarios de la promoción 2009-2010, un total de 31.292 personas, un año después de finalizar sus estudios. El 62 por ciento de los egresados eran mujeres, colectivo que fue mayoría en todas las ramas de estudio salvo en las de Enseñanzas Técnicas, y cuya presencia superaba incluso el 70 por ciento en Ciencias de la Salud.
Atendiendo a la titulación académica, el estudio señala titulaciones en las que el 100 por ciento de los egresados se encontraba trabajando al año de culminar sus estudios, como el caso de la diplomatura en Radioeléctrica Naval, Ingeniero Técnico Industrial (Plan 1971) o la licenciatura en Marina Civil. Les siguen, en porcentaje de inserción, los estudios de Medicina (90 por ciento), licenciatura en Máquinas Navales (80 por ciento), las ingenierías en electrónica (81 por ciento), organización industrial (76 por ciento) e informática (75 por ciento), o la diplomatura en terapia ocupacional (75 por ciento).
Considerando las cuatro titulaciones que registraron un mayor número de titulados en esa promoción, el porcentaje de graduados que había encontrado empleo al año de finalizar era superior a la media general (43 por ciento) en el caso de los diplomados en Enfermería (58 por ciento) y los licenciados en Administración y Dirección de Empresas (48 por ciento), mientras que era inferior en las diplomaturas en Ciencias Empresariales (41 por ciento) y los licenciados en Derecho (26 por ciento).
DESDE EL FIN DE ESTUDIOS HASTA EL CONTRATO, 143 DÍAS
Atendiendo a la situación laboral, casi el 7 por ciento de los que estaban trabajando eran trabajadores autónomos, porcentaje que se eleva al 57 por ciento para los egresados en titulaciones de Licenciatura en Odontología o el 42 por ciento para los diplomados en Podología.
Del total de personas egresadas en las universidades andaluzas en el año académico 2009-2010, el 18 por ciento estaba inscrito como parado un año después de finalizar sus estudios. Por titulaciones, la que presenta mayor porcentaje de personas paradas --entre aquellas que poseen un número significativo de egresados-- es la diplomatura en Trabajo Social (29 por ciento), mientras que Medicina se encuentra en el extremo opuesto, con un porcentaje de parados del 0,25 por ciento.
El informe también señala que desde que una persona egresada universitaria acaba su formación hasta que formaliza su primer contrato pasa una media de 143 días y que el 53 por ciento de los primeros contratos implican un desplazamiento entre el municipio de residencia del trabajador y el puesto de trabajo. Si atendemos a la duración del contrato, el 93 por ciento de las contrataciones son de carácter temporal y el 7 por ciento indefinidas. Aún así, el nivel de temporalidad de los egresados universitarios es menor que en el total de las contrataciones registradas en Andalucía en ese período (96 por ciento).
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