La crisis ha podido con la tradición. Así se deduce del bando publicado por el Ayuntamiento de Trigueros en el que explica las ‘novedades’ para las fiestas de los toros 2012. Mientras en la web oficial del municipio se puede leer todavía que “la Fiesta de los Toros o Capeas se celebra los últimos días de agosto y primeros de setiembre, siendo las fiestas más interesantes y animadas de Trigueros, después de las de San Antonio Abad” y que se trata de “una semana completa de encierros en horario de mañana y capeas por la tarde donde los festejos taurinos y las distintas actividades lúdicas copan el protagonismo de todo el pueblo”, olvídese de ello. De ocho días, pasan a cinco, del 29 de agosto al 2 de septiembre, pero, lo que es más importante, dicen adiós a la plaza empalizada, donde los triguereños y visitantes convivían en las jaulas y palcos compartiendo charla, emoción, e invitaciones a comer y a beber.
Aduce el bando firmado por la alcaldesa de Izquierda Unida, que gobierna en minoría, Victoria Caro, “la gravedad de la situación económica que atravesamos que nos obliga a realizar ajustes presupuestarios basados en el ahorro y la priorización del gasto público. Ahora, se crea una Comisión de colaboración que pretende hacer encajes de bolillos con 100.000 euros de presupuesto.
Así las cosas, en esta ocasión, no se crearán los muchos puestos de trabajo (“en torno a 15”) que “durante tres meses” servían para dar empleo a peones en la localidad, ya que sólo se montarán los palos que conducen los encierros a la plaza portátil, que, al parecer, es gestionada y montada por un particular, y no por el Ayuntamiento. Del mismo modo, si antes se adjudicaban palcos y jaulas, y quienes accedían a ellas no tenían que pagar por día, ni sus invitados por supuesto, ahora, los festejos de la tarde contarán con un precio de entrada de un euro por día y persona.
Lo cierto es que, según ha podido saber Viva Huelva de fuentes del PSOE local, no se ha contado con la oposición para conformar esta nueva forma de entender la fiesta que rompe con la tradición ni se habían explicado los radicales cambios en Comisión municipal alguna o en Pleno, por lo que no se pudieron trasladar a los ciudadanos, que ahora se encuentran con los hechos consumados. Quedan además, muchas preguntas por aclarar que no resuelve el bando municipal, y los ciudadanos nos han trasladado: no se concreta “si en años venideros se volverá a la tradicional plaza empalizada”, si se instalarán en el entorno de la plaza los tradicionales chiringuitos, o “porqué una formación de izquierda que dice anteponer el empleo a todo, recorta precisamente puestos de trabajo con esta nueva modalidad de Capeas”. Para aclararlas, servirá sin duda la asamblea popular que la alcaldesa ha convocado para el día 31 de julio a las en el Centro Cívico del Convento del Carmen.
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