Al haberse producido la recusación previa de los miembros de la Sección Primera de la Audiencia, dicho tribunal es “inhábil para manifestarse sobre la apertura de juicio oral” contra su representado, sostiene. El letrado ha recurrido en amparo ante el Constitucional porque su doctrina “es muy clara y contundente” en el sentido de que la declaración de un coimputado (por el testimonio de El Cuco) no puede ser prueba suficiente par procesar a un acusado a menos que existan otros elementos periféricos que lo corroboren.
En este caso, sostiene el abogado que la única prueba de que Francisco Javier participase en la operación para sacar el cuerpo de Marta de la vivienda de la calle León XIII, el 24 de enero de 2009, es el testimonio del menor de edad apodado el Cuco, que tenía motivos de enemistad porque el asesino confeso, Miguel Carcaño, lo había implicado a él en el violación y asesinato de la joven de 17 años.
"No existe corroboración con otras pruebas de ningún tipo, solo es la declaración incriminatoria del menor lo que hace que se procese" a su representado, dice el recurso, que añade que el contacto anterior de la Sección Primera con el caso le hace "inhábil para manifestarse sobre la procedencia de apertura de juicio".
"El derecho a un proceso equitativo comporta también que el análisis de las acusaciones sea observado por un tribunal que no haya con anterioridad formado un prejuicio de calado", añade.
En la nueva tramitación del caso Marta para ser enjuiciado por un tribunal profesional, los padres de la joven han pedido 52 años de cárcel para el asesino confeso y diez años para su hermano por presuntos delitos de encubrimiento, profanación de cadáveres, amenazas al Cuco y contra la integridad moral de la familia de la víctima.
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