En rueda de prensa, el secretario general del PP andaluz, Antonio Sanz, señaló que el balance de las medidas anunciadas por el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, es que afectan a toda la población y especialmente “a los más débiles”, a los que se les obliga a “apretarse el cinturón”.
Sanz explicó que los recortes anunciados supondrán “sacrificios” para el 93% de los ciudadanos, mientras que el “ahorro” de la administración autonómica sólo supone el 17%.
Según el dirigente del PP, como consecuencia de los recortes de los sueldos, la carga impositiva, la reducción de la inversión, la congelación de pensiones y la supresión de los cheques-bebé, el “sacrificio” de los andaluces ascenderá a 2.046 millones de euros, y los afectados será el 93% de la población.
De esta forma, en opinión de Sanz, la sociedad andaluza hará un esfuerzo “seis veces mayor” que la propia administración, ya que el plan de ahorro de la Junta apenas se traducirá en 340 millones, de los que 33 millones anuales serán de empresas públicas, pese a que su coste asciende a 5.000 millones.
Sanz denunció que la Junta carezca de un plan de ahorro, ya que éste se limita a recaudar mediante el incremento de impuestos, la reducción de la inversión y los recortes sociales, por lo que, a su juicio, queda demostrado que “es la sociedad la sacrificada y mientras tanto el Gobierno no está dispuesto a dar ejemplo”.
En cuanto al incremento fiscal, recordó que el Gobierno andaluz, en su “documento definitivo”, tiene previsto recaudar 411 millones al año, de los que sólo 30 corresponderán a la fiscalidad que se le impondrá a los “más ricos”.
El PP pedirá la comparecencia del Gobierno andaluz en el próximo pleno para que explique “el fraude” de las medidas y reclama “conocer ya la letra pequeña” de estas medidas, por lo que instó al Gobierno andaluz a que apruebe el decreto con estas medidas.
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