Hace tres años el Consejo de Hermandades eliminó el cartel pintado tras aquel cartel que tanto levantó con lo de El Greco y que precisamente este año, con motivo de del IV centenario de la muerte del pintor. No es que el cuadro estuviera mal pintado, sino que el error fue la presentación de la obra como la de “un Cristo cualquiera”.
Las críticas y el auge fotográfico llevaron al Consejo a pasar página y apostar por la fotografía, aunque siguiendo con el sistema de elección a dedo, al igual que se hacía con los pintores.
Con mayor acierto o menor, hubo carteles bonitos y otros no tantos. Uno en los que se esperaba más del pintor y otros en los que se superaron las expectativas. Sin embargo, no alcanzaron las expectativas iniciales.
Por otro lado, el cartel del Corpus Christi no sólo ha colmado la expectativa, sino que la ha superado por la viveza que muestra. Es una imagen del Corpus viva.
Sin embargo, el Consejo de Hermandades nunca pensó -así lo demuestran los autores- en José Usero Vargas para que pintara un cartel, como tampoco contó con Juan Pérez Bey, que sí pintó el cartel de la JCC.
Es más, incluso un pintor con dos obras que haga, las hace diferente. Por tanto podrían repetir algunos, al tiempo que el patrimonio del Consejo en materia pictórica aumentaría, y bien podrían formar parte del pretendido Museo Cofrade propuesto por el Ayuntamiento.
Por que a decir verdad las fotografías de los últimos carteles han sido todas con la luz del día y nada extraordinarias. Osea, lo mismo que se puede ver en alguna que otra revista o publicación o en webs cofrades.
Bueno sería que con tantos pintores y alumnos de la materia que hay en San Fernando se sacara un concurso a la mejor imagen para anunciar la Semana Santa o bien encargarle el cartel a artistas como el mismo José Usero Vargas, Juan Pérez Bey, Ángel Torres Aleu, y un sin fín de nuevos valores que pueden pintar el cartel oficial de la Semana Santa, porque en una ciudad donde se edita más de una veintena de carteles, el signo de distinción siempre debe estar en uno, y en este caso en el oficial de la Semana Santa. Esa era la idea, un cartel vivo.
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