Cuando la actividad del fútbol sala dejó de llamarse ‘futbito’, y ya no sólo tomaban parte los jugadores veteranos llegados del futbol 11, sino que la juventud irrumpió con fuerza en ella, en Jaén aparecieron grandes valores que demostraron condiciones para llegar a la élite del fútbol sala nacional.
Jaén ha sido una provincia donde el fútbol sala siempre está de moda, no sólo por la presencia varias temporadas del Jaén FS en la máxima competición española, sino por la aparición de deportistas que dejan y dejaron huella. Uno de ellos es Quique García, un gran jugador que, tras militar en el Jaén FS, recaló en Playas de Castellón o Caja Segovia, dos potencias nacionales, llegando incluso a defender los colores de España.
Su trayectoria deportiva continuó en los banquillos del Jaén FS, Andújar, Algarinejo o Burela FS, entre otros. Hace dos temporadas decidió iniciar una aventura en tierras de Qatar, para entrenar al Rayyan de Doha. Sus conocimientos, su trabajo y su personalidad han calado en aquellas lejanas tierras, haciendo campeón de liga a su equipo. Aunque el nivel es inferior al que se vive en España, Quique García está introduciendo métodos que hacen que el futbol sala crezca, hasta el punto que ya hay movimientos para hacer llegar esta actividad a los más pequeños.
Ahora, de nuevo, Quique que ha estado en Jaén unos días, aprovechados para poner en marcha Futsport, deporte y coaching junto a Desiré Amaro, volverá a tierras árabes para seguir su trayectoria para hacer más grande al equipo catarí, tras la confianza que en él ha vuelto a poner la directiva del Rayyan.
Quique García siempre fue un deportista competidor. Lo fue como jugador y ahora lo es como técnico. Su labor y su compromiso ya se deja notar en aquellas lejanas tierras, donde su carácter también está haciendo mella, en el plano positivo, en todos los que le rodean y forma parte del organigrama de la entidad a la que ha hecho campeona de liga.
Es más, no sería de extrañar, comentarios me han llegado de ello, no se descarta la posibilidad de que Quique García llegue a ser seleccionar nacional de Qatar, para llevar lejos a este pais en el mundo del fútbol sala.
Ahora vuelve con ilusiones renovadas y con la idea de seguir haciendo las cosas bien. El trabajo, tan insuficiente a veces para lograr objetivos deportivos, sí está dando sus frutos. Quique García, uno de los nuestros que llevó el pabellón jaenero como jugador y entrenador de élite en el fútbol sala nacional, lo lleva ahora en tierras árabes donde, acompañándolo en su quehacer diario, Jaén está presente y se deja notar, aunque aquí en tu tierra, ‘unas veces fue profeta y otras no’. Quique, ¡Adelante y mucha suerte!
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