El secretario del jurado, el catedrático de Música de la Faculta de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad, Pedro Jiménez, asegura que “trabajaremos para que conozca los antecedentes, aunque conoce a la perfección la mecánica del Premio y cómo se trabaja en el jurado”.
Su función como secretario será tomar nota de todas las cuestiones destacadas por el resto de compañeros, entre los que se encuentran tres ganadores del Concurso. “Es una forma de reconocer la trayectoria profesional y personal de los pianistas que han ganado en otras ediciones el Premio, y es una cuestión que hace interesante el Concurso”, decía Jiménez Cavallé.
Si otros años podía compaginar las clases en la Universidad con su labor como secretario, en esta edición del Concurso Pedro Jiménez estará implicado “totalmente” en el Premio, debido a su cargo y como apoyo del nuevo presidente.
Entre todos, asegura el secretario, trabajarán para valorar las cualidades de los pianistas, a través de pruebas con las que extraerán “una idea para saber si se trata de un pianista integral o especializado en alguna época musical, y el dominio que tiene”, continuaba.
Y es que el ganador del Concurso Internacional ha de ser “un artista”, ya que según palabras de Jiménez Cavallé, “la Música no deja de ser Arte”. Por todo ello, el grado de madurez del pianista que concurse será una de las cuestiones más destacadas en la valoración del jurado.
El nivel de Premio Jaén de Piano ha crecido edición tras edición y actualmente es “muy elevado”. El secretario asegura no ser ambicioso a la hora de pedir resultados, pero se conforma con “encontrar al pianista con el que se demuestre que el nivel sigue subiendo o al menos se mantiene”.
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