La Audiencia de Málaga ha condenado a una mujer por quedarse con dinero, en concreto 11.900 euros, que unos familiares lejanos le entregaron para que pagara un impuesto derivado de la compra de una vivienda, en la localidad malagueña de Torremolinos, que había gestionado.
Los hechos sucedieron en julio de 2009. Según la sentencia, los familiares le encargaron tramitar la documentación relativa a la compra de una casa y, en especial, el pago del impuesto de transmisiones patrimoniales devengado, que ascendía a 11.900 euros, para lo que éstos emitieron un cheque a su nombre por ese importe.
Pero, la acusada, dice la resolución a la que ha tenido acceso Europa Press, "con evidente ánimo de ilícito beneficio, no dedicó tal dinero al fin para el que se le entregó, sino que lo hizo suyo" y lo ingresó en una cuenta de la que era titular su pareja, en la cual se abonó al día siguiente.
Ante el impago, la Agencia Tributaria de Andalucía procedió a realizar una liquidación por importe de 14.162 euros, que incluía los intereses legales, cantidad que los perjudicados tuvieron que abonar en diciembre de 2013, además de que se les impuso una sanción por importe de 3.123 euros.
Por estos hechos, se le condenó por un delito de apropiación indebida y se le impuso seis meses de prisión, aunque se acuerda la sustitución de esta pena por una multa de 12 meses con una cuota diaria de seis euros; es decir, al pago de 2.160 euros, accediendo a que se abone de forma fraccionada.
La acusada pagó a los perjudicados esa cantidad de 11.900 euros en concepto de responsabilidad civil, pero en la sentencia, que se dictó con la conformidad de la mujer y de su defensa, se le condena a indemnizarlos con otros 5.386 euros, que podrá abonar también de forma fraccionada en un periodo de 22 meses.
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