Andalucía

Las cuentas de la lechera

El PSOE avisa del preocupante escenario de las empresas municipales: sin ingresos, con menos transferencias y sin recortar más en personal. Jesús Maza niega que el recorte sea sólo en plantillas y defiende medidas como la reducción de la deuda

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  • Empleados de Lipasam -

Con los ingresos propios bajo mínimos, en caída libre las transferencias del Ayuntamiento y sin poder recortar más en el capítulo de personal, a las empresas municipales se les presenta un “preocupante escenario” para este 2013, según los socialistas, que tienen claro que el gobierno municipal “miente” cuando afirma que tienen beneficios por primera vez cuando todo se ha sustentado en recortes de personal y descensos de salarios.

El portavoz del PSOE, Juan Espadas, y la edil Susana López desgranaron ayer un escenario nada halagüeño de unas empresas municipales de cuyas cuentas el Ayuntamiento ha destacado su entrada en beneficios. Para el PSOE, las cuentas siguen la trayectoria de contención que se ha seguido desde el anterior mandato pero continúan sin resolverse “problemas graves y preocupantes”.

“El gobierno de Zoido debe ser más sincero y admitir que 2012 se ha salvado por el esfuerzo de los trabajadores, que han sufrido duros recortes de personal, y por medidas impuestas, como la paga extraordinaria de Navidad, pero no porque haya habido una transformación en la gestión”, afirmó.


Para los socialistas, “si los ingresos propios siguen cayendo, las transferencias bajan y no se puede recortar más en personal, hay un problema que se debe resolver, y que pasa por buscar nuevas vías de ingresos y por reducir externalizaciones, como las que se están produciendo en Lipasam, con el caso más reciente del contrato externo a una asesoría jurídica”.

El “preocupante escenario” para 2013 lo argumentaba  basándose en los propios datos oficiales. Así, en lo que se refiere a ingresos propios, el descenso ha sido de 12 millones, especialmente en Envisesa por su “inactividad” (8,7 millones), seguida de Emasesa (2 millones), Tussam (1,7) y Lipasam (0.5). Dos detalles: Tussam ha dejado de ingresar 1,8 millones por la gratuidad del bono para la tercera edad y pierde 1 millón de viajeros por subir las tarifas, mientras que Lipasam ha ingresado un 23% menos por reciclaje.

En cuanto a personal, critica que los recortes han alcanzado los 6 millones en Emasesa y los 4,3 en Lipasam, pero han aumentado los contratos externos y ha sido insuficiente el recorte en los sueldos de los directivos.

“No se trata de ser catastrofistas, sino de ser realistas”, decía Espadas, recordando que ha habido aciertos pero también “operaciones inexplicables, como el préstamo concedido por Lipasam a Tussam justo antes del cierre del año”, apuntaba el socialista.

“Mejoría general”

Tras estas declaraciones, el vicepresidente de la Corporación de Empresas Municipales, Jesús Maza, ha defendido que las sociedades municipales experimentan una “mejoría general” frente a la caída de ingresos de la que avisa el PSOE, apuntando que los ajustes han recaído no sólo en las plantillas, sino en “todas las partidas de gastos”.

Maza ha recordado que el objetivo es “realizar una gestión eficaz para ganar eficiencia en cada una de las empresas municipales, así como reducir la cantidad de transferencias , algo que se ha conseguido en este último año y que ha permitido además obtener resultados positivos, a los que podemos llamar beneficios puesto que se ha logrado prestar el servicio sin superar el dinero que había disponible”.

Maza ha defendido que hay una “mejoría general” gracias a actuaciones “sobre todas las partidas de gastos y no sólo en personal”, poniendo como ejemplo la reducción de la deuda financiera en Tussam, “lo que ha compensado parte de los ahorros conseguidos por otro lado”. “Analizar sólo los ahorros en base a las consecuencias de las medidas del Gobierno central es un análisis muy simplista y superficial de las cuentas de cada empresa”, dice.

Ha defendido la reducción del 27,4% en los gastos por sueldos de gerentes y altos directivos (650.000 euros) y la “racionalización de las contrataciones externas, ya que antes se realizaban muchas y ahora se cuenta más con el personal de la empresa para ahorrar costes”.

“El objetivo tiene que ser tratar de hacer eficientes las transferencias recibidas y, si es posible, reducirlas, para afectar menos al bolsillo del ciudadano. Y en cualquier caso, gastar menos de lo que recibes, es decir, tener superávit”. “En definitiva, lo único que pretendemos es ofrecer unos servicios de calidad y tener unas empresas públicas eficientes y viables económicamente”, dice Maza.

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