La cartelera del Darymelia anuncia a Pedro Ruiz a finales de mes. Personaje polifacético que recalará en nuestra ciudad con su espectáculo “Mi vida es una anécdota”.
Un video suyo de autopromoción del espectáculo compartido en redes sociales ha generado una reacción digna de estudio. Apoyado tras una bicicleta invita a los jiennenses a acudir a finales de enero al Teatro Darymelia, manifestando que vendrá en coche o en tren, pero no en bicicleta. Y lo que no deja de ser una acción natural y con buena intención por su parte, ha hecho saltar como un resorte a numerosos jiennenses que poco más o menos han tratado de ingenuo a Pedro Ruiz por pretender venir a Jaén en tren.
Es triste que los jiennenses demos esta imagen, a golpe de click, despotricando en las redes sociales a ojos de los demás. Pero no es menos cierto que la situación ha forzado que así sea, porque si miramos al año que acabamos de despedir, el problema de Jaén con los trenes lejos de solucionarse se ha complicado mucho más.
El año 2023 ha dejado la hemeroteca plagada de malos momentos protagonizados por la deficiente – a veces inexistente- realidad ferroviaria de la provincia. Y este problema se ha convertido en uno de los principales caballos de batalla de nuestra sociedad civil.
El domingo por la mañana a las puertas de la estación de Renfe, se ha convocado una concentración para reivindicar aquello que legítimamente nos corresponde: igualdad en el trato. La iniciativa parte de la plataforma Jaén Merece Más – no confundir con el partido político, ojo- que en la primera semana del año no va a desaprovechar la oportunidad de sacar los colores a quienes tienen un año entero por delante para impedir que a los jiennenses se nos obligue a traslados forzosos en autobús, fallos continuos, retrasos sempiternos, averías u olvidos, como el que padecieron hace unos meses aquellos que se quedaron olvidados durante horas en la estación de Espeluy.
El nuevo ministro de Transportes tiene mucho por hacer en esta tierra. Por no decir prácticamente todo. Acostumbrado a moverse habitualmente en tren entre su Valladolid natal y Madrid, ojalá tenga a bien llegar hasta aquí en idéntico medio el día que le corresponda venir a Jaén. Fliparía en colores.
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