La tribuna de El Puerto

El burrito y el trigal de la pseudoterapia

Dr. Antonio Monclova Bohórquez | Muchos desconocen las razones para usarlas pero pocos las rechazan, y algunos responden que no sirven

Publicado: 27/04/2018 ·
10:19
· Actualizado: 27/04/2018 · 10:19
Publicidad Ai Publicidad Ai Publicidad Ai
Autor

Viva El Puerto

La redacción de Viva El Puerto analiza el panorama social y político de la ciudad para que estés al tanto de todo

La tribuna de El Puerto

Una ventana de opinión abierta a la actualidad portuense. El análisis más acertado de lo que ocurre en la ciudad

VISITAR BLOG

Una reciente encuesta del CIS indica que entre los españoles existe gran confusión sobre las pseudoterapias, pues la mayoría dice conocerlas pero no parece saber ni su diferencia con los tratamientos médicos, ni que está por demostrar que funcionen.

Muchos desconocen las razones para usarlas pero pocos las rechazan, y algunos responden que no sirven, que son un timo o que la medicina es suficiente, pero bastantes dicen que las usarían si se dieran las circunstancias. Algunos sociólogos señalan que favorecer a la vez pseudoterapias y ciencia indica confusión y desinformación.

Es el caso de las numerosas personas que consideran que la homeopatía es una medicina porque prescribe medicamentos con receta que vienen en cajitas con prospecto y se venden en farmacias.

Según la encuesta del CIS en esto también influye que muchos practican las pseudoterapias con apoyo de médicos o enfermeros, e incluso hay algunos centros de salud donde se informa sobre ellas. Por este motivo además de hacer campaña para que la gente entienda la diferencia entre medicina y pseudoterapias, muchos expertos piden a las autoridades sanitarias que también formen a los profesionales, para que en ningún caso se pueda confundir a un enfermo alejándolo de la oportunidad de recibir la terapia adecuada.

Según las encuestas más de la mitad de los españoles piensan que pseudoterapias como la homeopatía funcionarían de alguna forma, favoreciendo la vida sana donde la medicina no llega, una idea que viene de confundir lo natural con lo beneficioso y de creer que algunos tratamientos médicos son ineficaces. Por otro lado casi un tercio opina que ante una enfermedad grave además del médico se informaría por su cuenta, lo que facilita que las pseudoterapias lleguen más al enfermo por recomendación de alguien cercano que por la publicidad mediática. Confiando en pseudocientíficos y en falsos remedios han muerto personas que no se vacunaron o que abandonaron tratamientos médicos por otros “alternativos”.

Aún así lo más preocupante de las pseudoterapias y medicinas alternativas es que muchos de los que creen en ellas (incluso universitarios) no se oponen a la ciencia ni a que se vaya al médico, pero todos se dejan llevar por lo que creen, desarrollando narrativas propias muy sólidas, cuasi religiosas, contra las cuales choca cualquier intento de razonamiento.

No basta con formar a los profesionales e informar al público de la inoperancia de la homeopatía, el reiki, la reflexología o la sanación espiritual. Las pseudoterapias serán un gran problema en el futuro si no se legisla para evitar que la desinformación pseudocientífica engañe a tanta gente. Pensando solo en el trigo, el burrito es incapaz de no acudir al trigal, a pesar del castigo que le espera por comer lo que no debe. No vayamos más al trigal de las pseudoterapias.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN