El comité de empresa de Konecta BTO, la empresa de telemarketing que trabaja para clientes de Vodafone, con sede en El Puerto y que emplea a 200 trabajadores, unos 60 de Jerez, volverá a sentarse este viernes con representantes de la firma en la que es ya su tercera reunión en una semana y una de las más importantes hasta ahora tras anunciar su traslado. Según apuntan fuentes del comité, tras exponer un informe técnico argumentando motivos organizativos y productivos para centralizar sus servicios en sus centros de trabajo de Bollullos de la Mitación, en Sevilla, y Valladolid, y cerrar su sede en la localidad portuense, en el encuentro de hoy la empresa responderá al contrainforme presentado por los representantes del comité.
En dicho documento, además de rebatir los planteamientos de la compañía, que les aseguró que llevan planteándose esta decisión desde 2014, cuando Vodafone compró ONO, para la optimización de las llamadas, el comité le hizo entrega de una batería de propuestas de posibles sedes disponibles como centros de trabajo en Jerez, Puerto Real, El Puerto y Cádiz, tras los ofrecimientos que han realizado los distintos ayuntamientos de los citados municipios.
A priori, los representantes de la dirección se mostraron “receptivos” a estudiar estas propuestas. “Aunque esa negociación deberá ser entre los ayuntamientos y la empresa, nos dijeron que lo iban a valorar y que mañana (por hoy) nos traerían una respuesta”, señalan fuentes del comité. En la reunión también está previsto que la patronal traslade las condiciones de los traslados que los trabajadores deberán valorar. No obstante, la “lucha” de la plantilla, que sigue concentrándose en su centro de trabajo cada vez que hay reunión, es intentar mantener el centro de trabajo sino en El Puerto, en otro municipio de la provincia.No hay que perder de vista que la mayoría va a diario a trabajar desde La Barca, Jerez, Cádiz o Puerto Real, entre otras poblaciones gaditanas. Se trata de una plantilla con edades entre los 22 y los 52 años y con contratos que ni se acercan a los 1.000 euros, lo que hace poco viable el traslado.
Una negociación a contrarreloj
La Mesa de Negociación abierta la pasada semana se cerrará el próximo 8 de febrero, a partir de ahí habrá un mes de preaviso si el traslado se hace efectivo. Por tanto, trabajadores y empresa tienen por delante una auténtica contrarreloj para alcanzar un acuerdo.
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