Este martes entra en vigor el último ‘lote’ de casi 300 plazas más de estacionamiento regulado en el centro histórico y su entorno con el que se dará por concluida la polémica ampliación (en más de 1.800 plazas) de la zona azul que el Ayuntamiento ha puesto en marcha de forma progresiva en distintas zonas de la ciudad desde el pasado 1 de junio. En el caso de este enclave, los vecinos no se cortan y auguran un “gran fracaso” para la concesionaria y el Consistorio, al que no le ha quedado más remedido que resignarse y ejecutar la renovación del pliego de condiciones que realizó el anterior Gobierno local del PP. Una previsión que va en la tónica de lo que ha ocurrido hasta ahora en el entorno de Divina Pastora, Calle Paúl, Plaza de Toros, Pajarete o San Miguel, entre otros puntos,lo que ha obligado a la Administración local a replantearse seriamente la organización y distribución de las vías y convertir algunas azules en verdes (de larga rotación y que se han puesto en marcha por primera vez) ante las quejas de trabajadores del centro y el aspecto desierto que presentan una buena parte.
En el caso del centro histórico, el Ayuntamiento ha distinguido entre las zonas 13 y 14. La primera comprende Plaza Belén, Plaza San Lucas, Ánimas de San Lucas, Salvador, Espíritu Santo, Plaza San Mateo, Plaza del Mercado (compartida con zona 14), Campanillas, Valcázar (zona verde), Balderramas, San Blas, Nuestro Padre Señor de la Penas (zona verde). En esta misma zona, habrá una parte exclusiva para residentes con tarjeta ORA como es Benavente Bajo, Plaza Basurto, Plaza Benavente.
Por su parte, la zona 14 engloba Paralejo, Plaza Mendoza, Luis de Isasi, Almendrillo (zona verde), Plaza Melgarejo, Plaza del Mercado (compartida con zona 13), Plaza San Juan, Plaza del Cubo (zona verde), Merced (zona verde), Muro (zona verde), Cordobeses (zona verde), Alegría (zona verde), Plaza Becerra (zona verde). También aquí hay un espacio destinado únicamente para los residentes con tarjeta ORA como son Justicia, Salas, Plaza Dr. Ruiz de la Rabia, Plaza Cocheras, Dr. Mercado, Moral, Liebre, Plaza de Carrizosa, Ponce de León.
A priori, el punto de mira está en Plaza del Mercado, Plaza Belén y San Juan, que son las zonas más socorridas de los conductores de esta zona para aparcar. Las mismas que desde el martes, con las anteriormente descritas, cambiarán de estatus y pasarán a ser de pago. Además, los vecinos auguran problemas pues a estas alturas sigue sin señalizarse las mencionadas zonas para los residentes.
Vigilantes
No obstante, ahondando en una medida que pilló a la junta directiva de la asociación vecinal del centro histórico “de nuevas” pues acababan de constituirse “y no se nos dijo que el plazo de concesión era de 11 años”, en el seno del colectivo vecinal creen que esta medida puede contribuir a reducir la densidad del tráfico en la zona. “Salvando Plaza del Mercado y Belén, no estamos hablando de calles en las que los conductores entren para buscar aparcamiento, por lo que puede pasar que ahora ya ni entren, por lo que esperemos que esta ampliación de la zona azul sea un fracaso y le abra los ojos a los responsables municipales para que vean la necesidad de peatonalizar el centro. Una opción que el dirigente vecinal, Alejandro González, no ve “incompatible” con la implantación de la zona azul.
La discutida gestión de las tarjetas ora
Los vecinos andan molestos por la gestión de las tarjetas de residentes al haberse dado a personas sin empadronar, como así les consta. Tampoco entienden que se les cobre 20,75 a cinco meses de que acabe el año si en total cuesta 27,8.
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