El Xerez DFC encara el nuevo año con ilusiones renovadas. Después de un final de año con dos buenos resultados que han levantado en cierta manera la moral del equipo y de la afición, 2023 se ve con el objetivo de alargar la buena racha y dar un golpe sobre la mesa que permita ir subiendo puestos en la clasificación para certificar la permanencia en Segunda Federación.
Se acaba un año que empezó con un cambio de imagen del equipo en la anterior temporada. Un Xerez DFC que empezó a hacerse fuerte en casa y a sumar de tres para terminar consiguiendo la permanencia de forma tranquila en el mes de mayo. E incluso, los azulinos pudieron soñar con entrar en playoff con dos jornadas por delante, aunque el sueño se diluyó en Antequera. Por el camino, una visita histórica al Estadio El Arcángel y diez jornadas consecutivas sin perder para el equipo de José Pérez Herrera.
Lavado de cara en la plantilla una vez llegado el mercado de verano. Se marcharon muchos de los jugadores de la pasada campaña y llegaron otros nuevos que volvieron a despertar la ilusión de la afición. Pretemporada exigente contra equipos de superior categoría como Granada, Málaga o Real Madrid Castilla para encarar una campaña con cambio en la distribución de los grupos. De esta forma, el Xerez DFC pasó de enfrentarse a equipos extremeños para hacerlo contra los murcianos.
Se marcharon jugadores que llevaban alguna temporada ya en el club como Camacho, Jacobo, Javilillo, Curro o Máyor y otros que acaban de aterrizar esa misma temporada como Ocaña, Iriondo, Darío Guti o David Grande. Solo quedaron cinco componentes de aquella plantilla y las fichas se fueron completando con la llegada de otros jugadores: Edu Salles, José Ramón, Álex Quesada, Gianluca Simeone, Joao Paulo, Erik Aguado, Carri, Burdenski, Sergio Martínez, Razvan, Rasines, Rafa Parejo y Antonio Miguel, además de los canteranos Hugo, Rifat y Ricky Castro.
Comenzó la temporada con muchas dudas después de los primeros resultados. Tanto es así que el equipo ha llegado al parón de Navidad sin haber conseguido ganar en casa. La gran asignatura pendiente de una plantilla que solo ha sumado tres empates en siete partidos, siendo el peor local del grupo. Pero en cambio, se erige como el segundo mejor visitante ya que de los 18 puntos que tiene en su casillero, 15 los han logrado lejos de Chapín.
Ahora, el primer objetivo del nuevo año es vencer el próximo día 8 de enero al Vélez para lograr una primera victoria en casa y reforzar al equipo para una segunda vuelta en la que hace falta sumar más de tres para no pasar apuros. Por lo pronto, Lolo Garrido se convirtió hace unos días en el primer fichaje de invierno.
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