El anuncio de cierre de todo un clásico del comercio de Jaén nos apena y ha vuelto a poner en primer plano la problemática del comercio local, su presente y futuro.
Antes los comercios nacían, se consolidaban, morían y volvían a renacer con vida propia, obedeciendo a los razonables cambios generacionales, modas o a los movimientos urbanísticos. Hoy una vez cerrados, el local pasa a engrosar, sino es ocupado por un bar, la insaciable bolsa del Se Alquila o Se Vende.
Permitidme un ejemplo usando el caso de quien da nombre a esta columna, la Plaza del Pósito. En donde hasta no hace mucho había una Joyería (Pósito), un taller de mecheros y relojes, kiosco de prensa, floristería (Villarosario), pastelería (Flor y Nata), bodega (Bodegón), churrería, tienda de ultramarinos (Almacenes el Pósito), una papelería librería (Cruz), un estanco y dos bares (Fígaro y Pósito), todo un ejemplo heterogéneo y vivo del comercio local. Hoy solo queda la floristería y 7 bares. Como veis es más que una renovación generacional, es un cambio radical del modelo.
Los orígenes del problema son múltiples, pues a la tendencia de despoblamiento de la provincia y la capital, tenemos que sumar el desplazamiento poblacional desde el centro hacia los barrios en expansión, con lo que el número de vecinos en el abandonado casco histórico es cada vez menor a la vez que más envejecido. Sumemos el desorbitado precio de los alquileres y la alternativa de los centros comerciales en las afueras, además de la pérdida de influencia como capital. Los problemas de movilidad para acceder al centro y el cada vez más amenazante comercio por Internet, que en 10 años será el 70% del comercio global.
Que la administración, apueste por la rehabilitación de viviendas antes que por la construcción de nuevas, sería una buena opción para consolidar y hacer crecer la población del centro. Hagamos un centro histórico digno que atraiga turistas y fije población. Propuestas imaginativas como el proyecto “Plaza de Jaén”, reparto a domicilio, apertura por la tarde del Mercado, guarderías mientras compras... Implantar de una vez por todas un Plan de Movilidad que solucione el transporte público, el aparcamiento del Hípico y se consensuen medidas como la de peatonalización. Incentivar el ocio en el centro con Cines, Bolera, juegos infantiles, actividades callejeras… Cuantas acciones propicien que a los vecinos de aquí y también del resto de la provincia les sea atractivo acceder y consumir en la capital.
En fin que no permanezcamos inmóviles como los caballos de Cubero, pues nos jugamos el Modelo que ha regido nuestras vidas desde siempre y que si tiene que cambiar que lo hagamos entre todos y todas. No dejemos que el liberalismo, la dictadura de los mercados, sea quien diseñe nuestra forma de vida.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es
