Que la fiesta de la libertad aquí en Huelva es más fiesta que libertad ya se sabía, pero cuando el freno a la libre expresión y representación llega del propio presidente de los carnavaleros, el asunto se vicia más de la cuenta.
La agrupación puntaumbrieña de la Peña ‘Gracias mamá por parirnos así’ denuncia que recibió amenazas y coacciones por parte del presidente de la Federación Onubense de Peñas y Agrupaciones del Carnaval (Fopac), Antonio Hierro.
Tal y como han descrito a Viva Huelva fuentes cercanas a la citada chirigota, todo ocurrió días antes del inicio del concurso de agrupaciones. En un ensayo general, la chirigota, que parodiaba el tipo de los machos ibéricos como especie en vías de extinción, representó una parte del popurrí en la que bromeaban con el bigote de ciertos personajes públicos onubenses, especialmente del mundo carnavalero. Uno de esos personajes era Antonio Hierro, al que informaron de este detalle, y lejos de tomárselo con el sentido del humor que esta fiesta ha de llevar implícito, procedió directamente a coartar el repertorio.
Las citadas fuentes detallan a este periódico que minutos después de concluir el ensayo general José Carrasco, director de la agrupación, recibió la llamada de Antonio Hierro, exigiéndole que su imagen no fuera mostrada cuando tuvieran que cantar en el Gran Teatro. Aseguran que el máximo dirigente de los carnavaleros onubenses amenazó al autor puntaumbrieño con consecuencias más allá del propio concurso carnavalero: “Le dijo que él ya había logrado echar a gente del trabajo y que nos avisaba antes del concurso por lo que pudiera pasar”.
Así las cosas, la agrupación, que actuó el pasado jueves 22 de enero en el Gran Teatro durante la fase preliminar del concurso, decidió no arriesgarse y finalmente en la actuación oficial no mostró en el popurrí la imagen de Antonio Hierro.
Además, ya sea casualidad o causalidad, esta chirigota, una de las punteras del concurso año tras año, no pasó ni el primer corte, siendo uno de los cajonazos de un concurso con demasiadas cosas que arreglar. Entre ellas, que la fiesta de la libertad sea eso, sin más, y que, según denuncia esta agrupación, el presidente de la Fopac no sea el encargado de sustituir la libertad y el humor por la amenaza, la coacción y la censura.
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