La afición carnavalera que abarrotó el Gran Teatro Falla durante la función del domingo se llevará para siempre en la memoria la primera actuación de una agrupación extranjera en la capital gaditana. Los uruguayos llegaron con el respeto por bandera y elogiando a la ciudad de Cádiz recordando que son ciudades hermanas y que cuando ven la Tacita ven su “casa”.
Con esas afirmaciones y, por qué no decirlo, con más gracia que muchas chirigotas de Andalucía que han pasado por las tablas, se ganaron el cariño y los aplausos de un público entregado a la causa de Montevideo, que trajo un pedacito de su cultura en una noche que pasará a la historia.
Además, la función dejó el buen papel desarrollado por Los resilientes de Germán Rendón, que cerraron la función y que provocaron que el Falla no presentara mal aspecto en ningún momento de la sesión. Antes, el cuarteto de Iván Romero ya dejó buenas sensaciones y confirmó que el Carnaval ha perdido en su ausencia, a pesar de que su pase de preliminares fuera, quizás, algo escaso de tiempo y limitara el disfrute de la actuación.
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