Las cuatro empresas que gestionan, respectivamente, las cuatro plantas de biocombustible que Abengoa tiene en España han solicitado preconcurso de acreedores. Una situación que evidencia las dificultades por las que atraviesa este negocio, cuya matriz Abengoa Bioenergía está también en esa misma situación y forma parte de las 31 empresas acogidas a preconcurso desde el pasado 25 de noviembre. Abengoa Bioenergía perdió 254 millones en 2014.
Sólo una de esas cuatro, la que se ubica en San Roque (Cádiz) y que además es la única de 13 que tiene Abengoa en el mundo que produce biodiésel, está parada. Y desde hace más de un mes, según fuentes cercanas a la instalación. En San Roque trabajan 60 empleados y ha sido una planta con muchos problemas técnicos desde su inauguración en 2009.
Está situada en terrenos de la refinería de Cepsa, a la que venía surtiendo de diésel verde para mezclarlo con el convencional y cumplir las especificaciones de uso de biocombustibles establecidas por la Comisión Europea. De hecho, Abengoa y Cepsa cofinanciaron los 42 millones que se invirtieron en la factoría. San Roque es además la planta con más capacidad de producción de las de Abengoa en España: 225 millones de litros al año.
Junto a ella, la más afectada por la crisis financiera de la empresa es la de Salamanca, que opera con altibajos aunque la empresa ha manifestado su intención de seguir operando. Asaja Castilla y León ya ha denunciado que ha dejado de pagar el maíz y otros cereales a los agricultores. Doce de sus 100 empleados, adscritos a I+D, han sido despedidos. Ha sufrido en años pasados cierres esporádicos por falta de rentabilidad y EREs temporales.
En Bioetanol Galicia, aunque con dificultades en momentos puntuales para poder hacer acopio de materia prima, se sigue produciendo. Y Murcia, donde se compraron 6.000 toneladas de maíz en noviembre que garantizan la producción de etanol este mes y el próximo, es la única en la que se sigue trabajando con mayor normalidad
Tren retenido
No obstante, de las instalaciones de Murcia sigue sin poder salir un tren cargado con etanol por valor de medio millón de euros porque la empresa no puede pagar 50.000 euros a Renfe Mercancías para transportarlo. Curiosamente, la planta de Murcia no suministra a la anexa refinería de Repsol en Cartagena por la mala relación que arrastran la petrolera y Abengoa Bioenergía. En Galicia, sin embargo, Repsol sí es uno de los principales clientes del etanol producido.
La situación en España, en cualquier caso, es mucho menos dramática que en EEUU, donde Abengoa ha parado su planta estrella, la de Hugoton (Kansas), donde producía biofuel de segunda generación (procedente de residuos, no de alimentos) y Colwich, en el mismo estado. Además, ha cerrado las oficinas centrales de Abengoa Bioenergía en Misuri, prescindiendo de hasta 230 empleados de los 263 que llegó a tener.
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