El Ayuntamiento de Cádiz afrontará a través del Plan Invierte un proyecto de conservación y mantenimiento del patrimonio que tendrá por objeto el Parque Erytheia y Kotinoussa, en la avenida de Andalucía; el acueducto romano en la plaza Asdrúbal; los cañones de las murallas de San Carlos, en el tramo de la calle Honduras y las tumbas púnicas de la avenida Fernández Ladreda.
Según el proyecto urbanístico al que ha tenido acceso Viva Cádiz, el patrimonio arqueológico de la ciudad se ha enriquecido con Gadir, el Teatro Romano o la Casa del Obispo, pero existen otros restos en la ciudad que hay que conservar y custodiar para que puedan ser disfrutados en el futuro. Como ciudad, el patrimonio arqueológico debe tener una estrategia de conservación de carácter urbano, pero sus peculiaridades geográficcas, su urbanismo y arquitectura antigua obligan a que la conservación tenga unas peculiaridades específicas. En los últimos años “se observa un incremento de denuncias relativas a actos vandálicos y al deterioro por agentes naturales que afean” estos recursos arqueológicos de la ciudad. De ahí que sea necesario un proyecto de conservación.
Además del vandalismo existen factores climatológicos, antrópicos, biológicos y edafológicos. De ahí que se trate de una conservación preventiva con intervenciones puntuales que frenen el proceso de deterioro, de tal forma que se pueda poner en funcionamiento un plan de mantenimiento anual.
Los casos
La Casa Romana del parque Erytheia será sometida a una limpieza general, eliminación de vegetación intrusiva, cambio de pavimento, eliminación de grava, reparación de la zona vallada, eliminación de grafittis y pintado del interior de la alberca romana, entre otras acciones, Asimismo, se hará una limpieza general de la cisterna romana, se repondrán los elementos desprendidos y se reparará el revestimiento interno, a la vez que se consolidarán las estructuras y se harán las reparaciones pertinentes.
Mientras tanto, los cañones serán sometidos a una intervención de choque para la hidratación de la madera, se sustituirán los elementos perdidos y se fijarán las piezas, a la vez que se repararán las zonas con oxidación.
Otro de los recursos que se verá sometido a mejoras será el acueducto romano y las tumbas de la plaza Asdrúbal, que serán limpiados de restos de grafitti y se les instalará una cartelería explicativa.
En cuanto a los enterramientos de la avenida Fernández Ladreda se les colocará una placa explicativa, según indica el proyecto de la Oficina Técnica, después de que fuera eliminada por actos vandálicos.
En el mismo proyecto recalcan la necesidad de que el ciudadano sea una parte fundamental para la conservación del patrimonio, con el respeto y con la vigilancia y participando en la difusión.
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