La Asociación de Vecinos de Zahora "Costa de la Luz" ha presentado una denuncia formal ante la Subdelegación de Gobierno en Cádiz, así como ante la Policía Local y Guardia Civil de Barbate, por "la persistente falta de acciones del Ayuntamiento para abordar problemas críticos de seguridad y movilidad en Zahora".
La asociación adjuntó a la denuncia un dossier fotográfico que ilustra "el deterioro del viario interior de Zahora y los accesos a la playa". Asimismo, incluyó una copia del requerimiento del año pasado dirigido al Ayuntamiento para la reparación, junto con un informe detallado sobre las "graves deficiencias en el viario público de la zona", que la Policía Local ya había transmitido al alcalde y a las concejalías de Vías y Obras y Disciplina Urbanística el año pasado, instando a una acción urgente, especialmente de cara a la temporada de verano. Sin embargo, "casi un año después, estas cuestiones siguen sin resolverse", según señala el colectivo vecinal.
Representantes de la asociación se reunieron reste lunes en el Ayuntamiento con el alcalde, Miguel Molina y los concejales de Pedanías, Urbanismo y RSU y Limpieza Viaria, Mario Caballero y Francisco Muñoz. En relación con las preocupaciones planteadas, el alcalde anunció que" se dará instrucciones a la Policía Local y a Vías y Obras para abordar las señalizaciones y llevar a cabo la poda y desbroce necesario para mejorar la movilidad". También se acordó que el concejal de Pedanías se coordinará con Vías y Obras para reparar los caminos públicos interiores de Zahora, tanto los asfaltados como los de tierra. La asociación se comprometió a colaborar económicamente aportando parte del material, "siempre y cuando el Ayuntamiento provea de personal y maquinaria para llevar a cabo las reparaciones".
Las quejas de los residentes son constantes debido a la falta de "transitabilidad de los caminos". La asociación se ha visto obligada a denunciar la situación ante las autoridades, ya que considera que el Ayuntamiento debió abordar estas cuestiones "mucho antes, sin esperar a la llegada de una nueva temporada de verano, cuando los problemas de seguridad y movilidad se agravan con la afluencia de visitantes, que puede alcanzar entre 15 y 20 mil personas, generando un aumento extraordinario de vehículos y tráfico. Todo esto se suma a los serios problemas derivados de la falta de agua potable y saneamiento en la zona".
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