El alcalde de Arcos, el socialista Isidoro Gambín, se ha mostrado moderadamente satisfecho a la hora de analizar los datos del desempleo, ya que la inyección que supuestamente hubiera supuesto la contratación de 250 arcenses habría sido motivo suficiente para que la cifra de paro bajara no solo en 48 personas, sino en muchas más. Partiendo de la realista lectura realizada por el alcalde, Gambín también ha puesto el dedo en la llaga al admitir que están siendo numerosos los ciudadanos que por motivos laborales se están desplazando a lugares como Mallorca, otras islas y puntos costeros. A pesar del panorama buscando un empleo preferentemente en el sector servicios (hostelería), no deja de encajar la bajada del paro como un dato positivo que se produce por cuarto mes consecutivo en Arcos, a la espera de que ésta sea la tónica en lo sucesivo. Otra lectura clave a propósito de los datos del desempleo es la de los sindicatos, que apuntan a una manifiesta precariedad del empleo generado, con sueldos equiparados al salario mínimo y que no están ayudando a que la clase trabajadora abandone, como está ocurriendo en muchos casos, la pobreza. Los sindicatos, especialmente CCOO, vuelven a poner en el ojo de mira la reforma laboral del Gobierno y sus posibles consecuencias sobre el deterioro del empleo en España.
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