La provincia de Málaga ultima los preparativos para pasar este lunes a la fase 2 de la desescalada del confinamiento por la pandemia de coronavirus, en la que una de las novedades será la reapertura de las playas para el baño y el uso.
En el caso de la capital malagueña, su temporada de playas comienza oficialmente el 15 de junio, aunque el Ayuntamiento ha hecho un esfuerzo para que la mayor parte de los servicios estén disponibles ya en el pase a la fase 2, ha informado este domingo el consistorio en un comunicado.
Los bañistas deberán hacer un uso responsable de las playas y respetar un perímetro de seguridad de dos metros con respecto a otros usuarios, salvo en el caso de bañistas convivientes, tal y como señala la guía para la fase 2 del Ministerio de Sanidad.
Los aseos públicos de las playas serán adaptados en los próximos días con automatismos y sistemas de higienización continuos mediante lámparas ultravioletas germicidas, y también contarán con sensores para las descargas del inodoro y pedales para el lavabo como medidas para evitar el contacto.
Cuando el usuario abandone la instalación comenzará el proceso de desinfección durante quince minutos, y los aseos estarán dotados igualmente de dispensadores con gel hidroalcohólico.
Además, hasta el 14 de junio habrá un servicio de salvamento, socorrismo y primeros auxilios en ocho de las playas de la ciudad, con motivo de la situación extraordinaria, que a partir del día 15 se verá reforzado al comenzar oficialmente la temporada de playas.
Funcionarán las 136 duchas y los 45 lavapiés, que deberán usarse individualmente y manteniendo las distancias, como señala la normativa, y se ha instalado cartelería informativa de las nuevas normas de comportamiento en la playa por la COVID-19.
Igualmente se incorporarán este lunes los veintiún operarios del servicio de mantenimiento y, en cuanto a la limpieza de las playas, desde mediados de mayo se están realizando varias tareas diariamente que se prolongarán hasta final de la temporada.
También desde este lunes, siguiendo las recomendaciones del Ministerio, se efectuarán operaciones de desinfección en las zonas de acceso a las playas, barandillas y papeleras, con la disolución de hipoclorito que indican las autoridades.
La incorporación de los vigilantes de playa COVID-19 de la Junta de Andalucía el 15 de junio supondrá un refuerzo en las tareas de control y trabajarán coordinadamente con los servicios municipales.
A esto ayudará también el refuerzo del servicio de megafonía que permitirá recordar la necesidad de mantener el distanciamiento social y normas de comportamiento a los usuarios, así como la vigilancia de Policía Local y Protección Civil.
En Marbella, el Ayuntamiento empleará drones de la Policía Local y una aplicación informática para el control del aforo en las playas, y el dispositivo de seguridad estará formado por veinticuatro policías y una veintena de voluntarios de Protección Civil.
A ellos se sumarán los socorristas contratados en dos fases por el Ayuntamiento, en concreto veintidós desde este lunes cifra que, a partir del 15 de junio y durante toda la temporada de verano, alcanzará los 41.
En Fuengirola, el Ayuntamiento ha establecido el uso obligatorio de calzado en los accesos a las playas y las zonas de duchas y lavapiés, se controlará el aforo mediante inteligencia artificial y se vigilará el litoral con drones, además de habilitarse un pasillo de entrada y otro de salida en cada acceso a la playa.
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