|La Invisible sigue adelante con sus planes evitar el desalojo que temen por parte del Ayuntamiento de Málaga. Ayer lunes, representantes de este espacio cultural presentaron los resultados de la Inspección Técnica de Edificio (ITE) que según explicaron se demuestran que “no son necesarias medidas urgentes, ya que no existen problemas graves de estabilidad estructural ni se observan riesgos de desprendimientos”, explicaba Kike España,miembro del equipo técnico responsable de La Invisible. Este informe forma parte de la primera de las cuatro fases en las que está proyectada la rehabilitación global del inmueble y a la que le calculan una inversión de 150.000 euros con una duración de obras estimadas en un margen de dos a cuatro meses. “Como no podía ser de otra manera en un edificio del siglo XIX, es necesario acometer una serie de intervenciones”, añadía España pero añadió que “como en todos inmuebles malagueños de estas características, la ITE es desfavorable debido a defectos perfectamente subsanables, como queda recogido”. La Invisible cuenta con financiación a través de entidades sociales para adelantar esa cantidad, y por su parte, el arquitecto Eduardo Serrano señaló también que “nuestro propio proyecto de rehabilitación fue reconocido por el Ministerio de Cultura, al seleccionarlo en 2016 como ejemplo en todo el país de intervención arquitectónica en conexión con el proyecto cultural que alberga”. “Ya no hay pretexto para demorar el inicio de las obras”,argumentaba Kike España mientras esperan la respuesta del consistorio
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