Concurso desierto
Según ha sabido Estepona Información, el concurso público para la adjudicación de este servicio había quedado desierto según se acordó en la Mesa de Contratación celebrada el pasado día tres. Sólo se había presentado una empresa al concurso, Iluminaciones Rivas, que lo hacía con la condición de cobrar la totalidad de la deuda que en estos momentos tiene con el Ayuntamiento de Estepona y que asciende a unos cien millones de las antiguas pesetas.
Al parecer, según fuentes municipales consultadas por esta redacción, esa ‘coletilla’ de la única empresa concursante fue lo que hizo que se declarase desierto el concurso al no ajustarse, por tanto, a lo establecido en las bases. Una vez que se declaró desierto el concurso, se negoció con la citada empresa, por ser la única que había ofertado, el pago de una parte de la deuda, unos trescientos sesenta mil euros, y que, además, se produjese un recorte respecto a los gastos de iluminación navideña del pasado año de unos cien mil euros y, poniendo como condición, por parte del Ayuntamiento, que la empresa retirase de su oferta esa condición del pago por la totalidad de la deuda.
Ante la manera ‘atípica’ de adjudicar el servicio, desde el Ayuntamiento se ha señalado que todo el proceso se ha llevado a cabo “atendiendo a la más absoluta legalidad”, aunque llame la atención que se haya empezado a trabajar en la colocación de los soportes de las guirnaldas antes incluso de la Mesa de Contratación en la que se aprobó la propuesta de adjudicación, mediante el procedimiento negociado, en unos ciento setenta mil euros, estando pendiente incluso de la firma del decreto de Alcaldía o de su aprobación en Junta de Gobierno Local, es más, según ha podido confirmar esta redacción, sin siquiera haberse notificado ni haberse constituido la fianza.
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