El mendigo que, presuntamente, mató este pasado miércoles a un policía nacional de 33 años, al que apuñaló cuando iba a ser detenido, ha sido trasladado este jueves desde el Hospital Regional al Clínico 'Virgen de la Victoria' de Málaga, que cuenta con un módulo penitenciario, han informado a Europa Press fuentes sanitarias.
Stefan Reinert, un alemán de 36 años que ya había sido detenido en varias ocasiones, en una de las cuales llegó a agredir, incluso, a un policía local, estando, de hecho, reclamado por un juzgado, presenta heridas superficiales por arma blanca y de fuego y su evolución es favorable.
Este individuo, que vivía como okupa en un local abandonado de la calle Frigiliana, fue evacuado inicialmente al Hospital Civil y, a continuación, al Regional, donde se encontraba en planta bajo custodia policial. Finalmente, se ha optado por su traslado al módulo penitenciario del Clínico Universitario para su completa recuperación.
Por su parte, el dependiente de una carnicería que también resultó herido en este suceso con un balazo en el hombro izquierdo, un varón de 31 años, cuya identidad responde a las iniciales F.J.S.B., se recupera en planta del Hospital Regional y su evolución también es buena.
El agente, Francisco Enrique Díaz Jiménez, casado y padre de una niña, llevaba nueve años en el Cuerpo. La capilla ardiente con sus restos mortales se ha instalado en la Comisaría Provincial de Málaga.
Los hechos se produjeron sobre las 19.00 horas en la calle Frigiliana cuando el agente, adscrito a la Comisaría Provincial, iba a proceder a la detención de este indigente, al parecer, bastante violento y con problemas psiquiátricos, según aparece en su ficha policial. Al acercarse a él y sin mediar palabra, sacó un cuchillo y le apuñaló en el pecho.
Como consecuencia de las lesiones causadas el agente tuvo que ser evacuado en una ambulancia al Hospital Regional, donde ingresó en estado crítico con una herida de arma blanca en el tórax, falleciendo horas más tarde.
Ante la agresión, el compañero de Francisco Díaz tuvo que hacer uso de su arma reglamentaria, resultando también heridas por balas perdidas otras dos personas.
Concretamente, el comerciante que presentaba un balazo en el hombro y una joven de 28 años, identificada como M.R.C.C., que sufrió un roce en la cabeza por una esquirla y que, tras ser curada en el Hospital Clínico, recibió el alta médica.
Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es