El PSOE-A ve difícil cualquier posibilidad de acuerdo con el PP-A mientras no defienda a Andalucía con contundencia ante el Gobierno de Mariano Rajoy. Ha manifestado además que la falta de interlocución con el PP-A es consecuencia de que ese partido se ha convertido en un "reino de taifas", con una interinidad permanente, por la "ausencia de un liderazgo" claro.
En declaraciones a Europa Press, el portavoz del PSOE-A en el Parlamento, Francisco Álvarez de la Chica, ha querido dejar claro que cualquier margen de acuerdo con el PP-A pasaría de forma inexcusable por que ese partido defienda con claridad y rotundidad los intereses de Andalucía y su Estatuto de Autonomía ante el Ejecutivo de la Nación.
"Tiene que empezar a exigir a Mariano Rajoy lo que es de Andalucía y de los andaluces, como el dinero que no llega por una injusta aplicación del sistema de financiación autonómica o por las liquidaciones reconocidas por la Intervención General del Estado, así como un nivel de inversión en los PGE en función de la población", según ha señalado Álvarez de la Chica.
Ha indicado que con la tramitación parlamentaria de los PGE de 2014, el PP-A tiene la oportunidad de dejar de darle la espalda a Andalucía, apoyando las demandas de esta tierra, que los socialistas han planteado a través de diversas enmiendas. "Si esos pasos los va dando, lógicamente nos iremos encontrando", ha señalado el portavoz socialista.
No obstante, Álvarez de la Chica ha considerado que el principal problema del PP-A es que aún no ha superado el resultado electoral de las pasadas elecciones autonómicas de 2012 y es consciente de que ahora están en una "peor" situación, lo que dificulta que alguien quiera asumir el liderazgo.
A su juicio, es sorprendente que un partido con una responsabilidad de gobierno tan importante en provincias y municipios de Andalucía se encuentre "tan desorganizado y se haya convertido en un reino de taifas, sin liderazgo ni interlocución".
Ha puesto el acento en que "nadie explícitamente está disponible para asumir el liderazgo del partido porque sabe que su situación es ahora peor que la que tuvieron tras las elecciones de 2012".
Esta situación, según ha agregado el portavoz socialista, ha generado la falta de interlocutores en el PP-A con capacidad para tomar decisiones.
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