La nueva ejecutiva del sindicato la integran veintitrés miembros -doce hombres y once mujeres-, dieciocho de la candidatura de Carbonero y cinco del sector crítico (unión provincial de Sevilla).
La candidatura de Carbonero, la única que se presentó a la secretaría general, obtuvo un respaldo del 75 por ciento -274 votos a favor, 91 en blanco y un voto nulo- de un total de 366 votos, mientras que la lista presentada a la ejecutiva por el sector oficial recibió 276 votos a favor, un 75,4 por ciento, y la liderada por Rafael Fernández Serra consiguió 86 votos.
Tras su proclamación como secretario general para un segundo mandato de cuatro años, Carbonero agradeció la "confianza" de los representantes sindicales y de los afiliados y aseguró que el "éxito no es suyo sino de todos los que han hecho posible" que el sindicato haya avanzado en estos años en representatividad.
CCOO-A concluyó ayer un "congreso de nivel" en el que ha fijado como principales objetivos para este mandato situar el valor del trabajo y la igualdad en el centro de la sociedad y del que ha salido una organización "reforzada" para afrontar los retos.
Del congreso sale también un sindicato "afianzado" en la independencia, ya que una organización de masas "influyente e importante" tiene que tener "muy arraigado el perfil" de autonomía.
En este sentido, emplazó a la organización sindical a "no quebrar" la confianza de los trabajadores y a asumir la responsabilidad de "trabajo y compromiso con los nuestros".
En esta coyuntura económica, el sindicato se moverá entre las exigencias y las movilizaciones -ya ha convocado conjuntamente con UGT un calendario de movilizaciones que concluirá en abril- y la próxima será el 15 de marzo en Sevilla, cuya principal reivindicación es la integración del régimen especial agrario de los trabajadores del campo en el general de la Seguridad Social.
Pide a Chaves que no ceda ante las presiones de los grandes empresarios agrícolas
Carbonero exigió al presidente andaluz, Manuel Chaves, que presione" al gobierno español para que "no ceda ante las presiones de los grandes empresarios agrícolas", que son los "que siempre han impedido el desarrollo de Andalucía".
Expuso las actuaciones que defiende CCOO en el terreno socio-económico y que se resumen en un cambio del modelo productivo para que no se base en la construcción sino ampliarlo a otros sectores más especializados y la mejora de la protección social ampliando las coberturas y la cantidad de la prestación por desempleo (pasarla de 421 euros al mes a 527).
También demandó a las administraciones públicas "agilidad y eficiencia" en la ejecución de las "medidas paliativas" para paliar los efectos de la crisis económica.
Pidió a los representantes sindicales que "visualicen" las propuestas de CCOO en los centros de trabajo porque introducirlas en la agenda política "no es fácil, salvo cuando se convocan movilizaciones", y que extiendan el sindicato a las empresas.
Ante la nueva situación los sindicatos tienen la "responsabilidad" de tener una visión más amplia en la negociación colectiva y practicar la responsabilidad social en las empresas, sostuvo Carbonero.
El congreso, en el que intervino el alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, aprobó una resolución en la que se reclama que se "acaben los expedientes de regulación de empleo injustificados" y se expresa el rechazo a que se incumplan los convenios pactados o a una política de congelación salarial.
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