En la intervención, los funcionarios realizaban servicios de inspección habituales y comprobaron que el vehículo llevaba una carga de 430 kilos de merluza de entre 11 y 14 centímetros, por lo que el pescado no cumplía la talla legal autorizada para su captura, situada en 27 centímetros.
Esta acción forma parte de las operaciones que habitualmente desarrolla la Inspección Pesquera tanto en los puertos y centros de distribución de pescado como en las carreteras, en colaboración en muchos casos de los Cuerpos de Seguridad del Estado, espacialmente de la Guardia Civil y la Policía Autonómica, como ha ocurrido en esta ocasión con el Seprona. Con estas intervenciones, se pretende evitar el tráfico y comercialización de especies prohibidas para su consumo, eliminando así el uso de artes vedadas y la presencia de inmaduros en los mercados para garantizar el mantenimiento sostenido de los bancos y recursos pesqueros.
Los servicios de Inspección Pesquera de la Consejería de Agricultura y Pesca realizan sus funciones tanto por mar como por tierra a lo largo de los 800 kilómetros del litoral andaluz, en carreteras y provincias de interior, así como en las 25 lonjas.
La Consejería de Agricultura y Pesca desarrolla numerosas campañas de concienciación social en medios de comunicación y en colegios para sensibilizar a los ciudadanos en general y escolares en particular de la necesidad de garantizar la biodiversidad. Para ello se informa de las tallas mínimas exigibles del pescado para su consumo y la importancia que tiene respetarlas para preservar los recursos pesqueros existentes.
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