Según ha informado el Instituto Armado en un comunicado, los detenidos conseguían las llaves de inmuebles y vehículos diciendo a sus dueños que era para enseñarlos a posibles compradores. Posteriormente, enseñaban a los posibles compradores las propiedades como si fuesen ellos los dueños y solicitaban una "señal" en concepto de reserva, de manera que cuando conseguían el dinero los estafadores cambiaban de domicilio y daban de baja sus teléfonos para no ser localizados.
En este sentido, durante la investigación los agentes averiguaron que uno de los detenidos tiene antecedentes por haber estafado a ciudadanos chinos 25.000 euros en una transacción de dos vehículos de gama alta que nunca se materializó.
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