El dominio fue total por el conjunto blanco. Desde el primer momento, Marcelo y Fabio Coentrao se convirtieron en los amos de la banda izquierda para dar el relevo minutos después a Kaká, el mejor de la primera parte.
El brasileño se mostró ágil, veloz y preciso en sus constantes internadas, y dio un magnífico pase cruzado para que Callejón marcase el primer tanto.
El canterano protagonizó acciones destacadas. Tuvo una de las ocasiones más claras a los diez minutos tras un taconazo de Joselu y un pase ajustadísimo de Granero, muy suelto y activo en el centro del campo.
El Galaxy, mucho más rodado que el conjunto blanco y en plena temporada, apenas llevaba peligro al arco madridista, liderado por un Kaká que insistía por la banda izquierda y reclamaba un posible penalti en el minuto 18.
Ni siquiera las faltas de Beckham intimidaron a Casillas, prácticamente inédito en la primera mitad, aunque el escaso peligro de los estadounidenses casi siempre llegó a balón parado. Avanzaban los minutos y con ellos la sensación de que frente al Madrid había poco rival, aunque los blancos no terminaban de materializar sus oportunidades.
Todo cambió en el minuto 30 con el tanto de Callejón, bien definido, que nació en las botas de Coentrao desde la banda izquierda, auténtico talón de Aquiles del Galaxy. Nueve minutos más tarde, Joselu, en jugada personal, anotaba el segundo tanto después de que el balón rebotara en David Beckham, que desvió la pelota y despistó al portero Saunders.
Los Galaxy reaccionaron en el arranque de la segunda mitad con un juego más ofensivo, pero justo cuando los de Bruce Arena comenzaban a creer en la posibilidad de recortar distancias apareció Cristiano Ronaldo, en jugada personal, para ejecutar el gol de la noche con un potente disparo con la zurda tras varios recortes.
El Madrid cambió a nueve de sus jugadores en el descanso, pero su torrente de juego no cesaba. Un pase de Coentrao desde la banda izquierda dio origen al cuarto gol tras el cabezazo del francés Karim Benzema, en unos minutos marcados por la apuesta ofensiva de los de José Mourinho y la espectacularidad de Mesut Ozil, con el 10 a la espalda.
Precisamente, ese ímpetu propició que el Galaxy se apuntara el tanto del honor, en el minuto 66, obra de Cristman, de cabeza, tras un rechace del portero Adán.
El partido perdió fuelle y el Madrid templó y se dedicó a tocar más, mientras que el Galaxy no dudaba en esperar atrás. Sólo unos destellos de clase de Benzema, Xabi Alonso y Jesé arrancaron los aplausos de un público que no dudó en despedir al conjunto blanco con una gran ovación.
José Mourinho, entrenador del Real Madrid, dijo al término del primer amistoso de la pretemporada, que el club espera protagonizar un año exitoso, aunque de momento sólo puede prometer trabajo. “La diferencia entre ganar o no la marcan los pequeños detalles”, comentó el portugués en la rueda de prensa posterior al encuentro, celebrada en el exterior del Memorial Coliseum.
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