El cálao gorginegro, una especie amenazada, se ha reproducido con éxito por primera vez en España, ya que han nacido dos polluelos en el parque de animales Bioparc de Fuengirola (Málaga), en el que se ha llevado a cabo un programa de reproducción, incubación y eclosión de esta ave.
Los dos polluelos nacieron la última semana de junio, pero ha sido ahora cuando la madre ha decidido salir al exterior rompiendo la cavidad del nido con su pico y con ayuda de sus crías, ha explicado este viernes en un comunicado el centro.
Eso se produce por el curioso proceso de anidación de los caláos, ya que el hogar de la madre durante todo ese periodo -que puede alargarse cuatro meses- es el tronco hueco de un árbol con cavidad de acceso cerrada y tan sólo una pequeña ranura que conecta sus picos con el exterior.
En ese espacio reducido, de unos cuantos centímetros de ancho, tiene lugar la puesta e incubación de los huevos, la posterior eclosión y el crecimiento de los polluelos durante sus primeros meses. Así, están a salvo de las amenazas del exterior y sobreviven gracias al alimento que el padre les entrega a través de la ranura.
Los cuidadores han intensificado ahora la vigilancia sobre los polluelos, ya que son frecuentes las agresiones entre ellos en esta especie y en este periodo. Se ha instalado una cámara de videovigilancia, en el mismo sitio desde el que los visitantes al parque podrán observarlos.
Con los programas de conservación en marcha y los nacimientos de cálaos de las Bisayas y gorginegro, el parque de animales malagueño se sitúa como el más activo de España en la conservación de estas aves exóticas, ya que alberga cuatro de las dieciséis especies descritas en la actualidad, todas ellas amenazadas.
El cálao gorginegro (Rhyticeros undulatus), es una de las especies más características de los bosques tropicales del Sudeste asiático. Como miembros de la exótica familia de los cálaos, estas aves son carismáticas, coloridas, muy reconocibles, y están amenazadas por la caza furtiva.
La tala de grandes áreas de selva tropical ha menguado los bosques de los que estas aves dependen para reproducirse y obtener alimento y refugio.
Los estudios de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) catalogan a esta especie como vulnerable. Su población está en decrecimiento y podría reducirse hasta un 50 por ciento en unos cincuenta años.
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