Los trabajadores habían convocado como medida de presión paros para los próximos días 21, 22 y 23 de febrero por el impago, después de que la empresa anunciase la suspensión del servicio desde el 1marzo. Finalmente, la empresa ha conseguido los 60.000 euros que necesita mensualmente para pagar las nóminas.
Cabe recordar, además, que la Delegación municipal de Infraestructuras aseguró que el área asumiría el personal hasta la llegada de otra empresa. El conflicto laboral surgió por el impago de entre 800.000 y un millón de euros por parte del Ayuntamiento.
No obstante, la plantilla exige el cumplimiento “a rajatabla” del convenio colectivo “porque no podemos permitir trabajar para una empresa que no tenga solvencia”.
En la actualidad, esta concesionaria se ocupa del mantenimiento y conservación de hasta 25.000 puntos de luz en las barriadas jerezanas, por lo que confían en poder llegar a un acuerdo y que el alumbrado público “no se vea afectado y no sea necesario llegar a la huelga.
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