En la clausura de la convención sanitaria del PP Arenas ha presentado doce propuestas de su programa de gobierno (con el compromiso de gobernar un máximo de ocho años y diez consejeros no trece como ahora), entre las que destaca unificar las consejerías de Salud y Bienestar Social, despolitizar la sanidad, un nuevo modelo de gestión de los recursos humanos y eliminar la obligatoriedad de que los médicos se jubilen a los 65 años.
La orden de la Junta que establece esa obligatoriedad "se deroga en 24 horas", ha señalado Arenas, quien se ha preguntado "por qué se puede ser presidente de la Junta con 65 años y no médico del SAS", en alusión a la edad del ex presidente Manuel Chaves y del presidente andaluz, José Antonio Griñán.
Ha partido de la base de que el gasto en Andalucía "se puede recortar de todos sitios", ya que hay muchos altos cargos (3.400 personas de libre designación), muchos coches oficiales y muchos móviles (más de 38.000), pero es "sagrado el gasto educativo, en salud y en servicios sociales".
Según el dirigente del PP, se intenta abrir un debate "ficticio" sobre el modelo sanitario porque es la Constitución la que garantiza un sistema sanitario universal y no los "socialistas o los populares", y, por tanto, ha defendido que la gestión debe estar en función de los pacientes.
En su opinión, los conciertos de los servicios sociales, incluida la sanidad, han crecido espectacularmente en 2011 en Andalucía y, de hecho, la convivencia del modelo público y del concertado ha permitido que no se "colapse" el sistema con la llegada de inmigrantes a España.
También ha planteado un nuevo modelo de los recursos humanos sanitarios, ya que los médicos en Andalucía son los peor pagados de España, y, además, se necesitan más de 1.000 facultativos y 5.000 profesionales de enfermería.
Por ello, ha considerado un "disparate" que se pidan notas muy altas para acceder a los estudios de medicina, ya que se intenta promover la educación de excelencia y cuando muchos estudiantes quieren acceder se les cierra el paso, ha aducido.
Es necesario también, según Arenas, despolitizar la sanidad, puesto que hay una "gran desconfianza por parte del socialismo hacia los profesionales y se ha montado un sistema de control" que ha llevado a muchos facultativos a abandonar el SAS, al tiempo que ha defendido los colegios profesionales.
Una reforma de la atención primaria con un incremento del presupuesto, una ley de plazos máximos y auditorías de las listas de espera, ya que hasta ahora lo que se hace es "maquillarlas", son otras de las propuestas planteadas por el dirigente del PP.
Asimismo, ha defendido una evaluación por instituciones externas de los servicios que presta la administración, ya que "nunca se han evaluado en treinta años" de gobiernos socialistas, pues "las políticas se tienen que prestar en función de quien lo hace mejor".
Ha considerado "indispensable" una cartera nacional de servicios públicos, de forma que si un tratamiento no se cubre en Andalucía sino en otra comunidad autónoma, debe ser la Junta la que abone ese importe y no el paciente.
El PP también llevará en su programa de gobierno un plan de salud mental y ha apostado por mantener el esfuerzo en investigación biomédica.
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