Antonio Iriondo puso en liza un equipo con un esquema clásico de 4-4-2; el portero y la defensa que ya conocemos de memoria, Raúl Silveira acompañado en sus labores de Carlitos, Canito por la derecha, Rodiel escorada a la izquierda pero con mucha libertad de movimientos. Arriba Puli e Iván Guerrero, que retornaba tras dos semanas en el dique seco.
Por contra, Rafael Berges, técnico pozoalbense, planteó un 4-1-4-1, con Alberto por delante de la defensa y una línea de cuatro por detrás del delantero Hugo. Recordamos que Rafa Berges fue campeón olímpico con la Selección Nacional Olímpica en Barcelona 92, junto a los Guardiola, Luis Enrique, Cañizares, Kiko, etc.
Se puede decir que hubo un tiempo para cada equipo. En el primer acto lució y brilló el San Fernando, embriagándonos con esencia de buen fútbol que el aficionado supo responder con sus aplausos.
Especialmente destacamos la primera media hora. El equipo salió fluido, con las ideas y los conceptos claros; el balón no rodaba, sino que se deslizaba de izquierda a derecha y de derecha a izquierda, con unos laterales que se desdoblaban con facilidad.
Con todo ello, llegaron las primeras ocasiones. En el minuto 7 Iván Guerrero aprovecha un balón que le llega rebotado y desde la frontal del área intenta sorprender al guardameta Díaz. Diez minutos más tarde llega una ocasión inmejorable, cuando Rodiel dispara desde larga distancia, no ataja bien Díaz, llega el rechace a Castillo, pero el disparo del jerezano lo saca como puede el guardameta cordobés.
Primer susto
El primer susto para los intereses azulinos llegó a los veinte minutos, cuando un balón dividido a la espalda de los centrales está a punto de aprovecharlo el goleador Hugo Díaz. En el 26 jugada de libro por parte del San Fernando. Pasamos a contarla. David Zamora despeja con el puño un ataque pozoalbense, el esférico llega a Rodiel (muy bien mientras estuvo en el terreno de juego), éste prolonga sobre Puli, que busca el espacio libre que recorre Canito, quien centra y tal y como viene Puli remata con su pierna buena, pero el balón llega muy al centro y bloca Díaz. Preciosa jugada, de principio a fin, con el único lunar de no acabar en gol.
Es el preludio del penalti que señala Santos Pargaña, al interpretar como pena máxima una internada del veterano Quero (ex Córdoba, Málaga, Valladolid, ....) que corta Castillo. A nuestro modesto entender, fue el propio delantero el que buscó el contacto. Fuera lo que fuera, Hugo Díaz en el minuto 28 lo lanza a la derecha y por bajo, pero se encontró con la figura de "el Divino" Zamora, volviendo a demostrar el porqué de su apellido. En este momento llevaba 298 minutos imbatidos.
Es paradójico pero el San Fernando, tras el penalti, acusó nerviosismo, cometiendo algunos desajustes defensivos. Y más aún cuando se tiene que retirar lesionado Roberto Rodiel, saliendo al campo el ghanés Prince. Iriondo mueve piezas: Prince pasa a la derecha y Cano a la izquierda.
La primera parte acabó con el uyy! de la grada tras una falta ejecutada por Iván Guerrero desde el borde del área. Empate a cero, a pesar de haber ocasiones y buen fútbol.
Segunda mitad
El segundo acto tuvo un guión bien diferente. Comenzó con un reparto de golpes, como si de boxeo se tratara, pero acabó con ligero dominio de los visitantes. En honor a la verdad el Pozoblanco se mostró como un excelente equipo, bien plantado, bien trabajado, con las ideas claras, con mucho oficio y picardía. Lo puso muy difícil.
El primer golpe de esta parte lo firma el centrocampista Jorge García, tras su remate de semivolea en el minuto 49. El segundo golpe lo firma y rubrica Canito. Minuto 53 de partido, balón que pelea y gana Prince, busca y encuentra a Puli, quien levanta la mirada y ve llegar desde segunda línea a Canito y éste la coloca con calidad y hábilmente muy pegada al palo. Gran gol que es recibido con júbilo por la parroquia azulina. La conexión USB Puli - Canito funcionó.
En el 62 el gaditano Iván Guerrero tiene una triple ocasión en la misma jugada. El meta Díaz, como si fuera Pedro, le negó tres veces la entrada del balón en la portería. A partir de ahí crecen en imagen los de Rafael Berges. Se lanzan arriba para buscar el gol del empate. La tiene Javi Bermúdez en el 69' cuando busca el ángulo de la meta isleña.
Otro penalti
En el minuto 73, el colegiado sevillano vuelve a ver penalti. Parecía el protagonista de la película Sexto Sentido: “en ocasiones veo penaltis”. Balón que es interceptado por un defensa azulino y que roza la mano de éste, es interpretado como penalti. Alfonso Gutiérrez, que había entrado minutos antes, no desaprovecha tan gran obsequio. A punto estuvo David Zamora de convertirse en Goliat. Es el empate a uno y es el primer gol que recibe el San Fernando en esta liga. Son 343 minutos de imbatibilidad.
Un gol así hace daño. Los de Iriondo acusan el mazazo y llegan a perder su identidad. Iriondo hace entrar a Reque por Iván Guerrero, provocando que Canito se mete de nuevo en la derecha, Carlitos en la izquierda y Prince por el centro. El tiempo se echa encima y definitivamente el partido igualado a uno.
El equipo a pesar del empate sigue invicto en su grupo. Ocho puntos.
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