En torno a las 19.00 horas, los hermanos de la hermandad de Nuestra Señora del Carmen sacaban a hombros a la imagen carmelita bajo un arco de flores desde la iglesia de Santa María del Mar. Antes, y como novedad este año, se produjo un acto protocolario oficiado por el párroco local, Francisco Echevarría, secundado por la participación de los alumnos de la Escuela Municipal de Música. A pesar de la espera, un gran número de personas se congregaron a las puertas de la parroquia hasta que la junta directiva de la hermandad, la representación de la Cofradía de Pescadores, las autoridades locales y las hermandades de gloria y pasión de la localidad iniciaron la procesión.
Una vez en la calle, la Patrona tomó la avenida de la Marina en dirección a Mar de Leva. Las obras en la explanada donde se está construyendo el edificio dotacional para las hermandades de Punta Umbría evitaron que la Virgen del Carmen pudiera visitar como acostumbra a la ermita de la Santa Cruz.
Desde Mar de Leva el desfile procesional se encaminó por Federico García Lorca, rodeando la Plaza Rafael Alberti por la calle Orinque y tomando Vulcano, hasta llegar a Mariscadores. Una vez allí, la imagen se adentró en la barriada que lleva su nombre a través del popular arco. Cientos de vecinos aguardaban a la patrona marinera alrededor de la capilla para brindarle una ofrenda floral.
De nuevo la procesión continuó por Federico García Lorca hasta llegar a las puertas de la residencia de ancianos 'María Auxiliadora' donde los mayores le ofrecieron ramos de flores antes de que la Alcaldesa Perpetua continuara por Mar de Leva hasta la avenida Ciudad de Huelva. Aquí otro de los momentos esperados, la subida corriendo y sin parar de la Cuesta del Carmen, antigua Cuesta del Cormorán, a hombros de los costaleros de la hermandad. Miles de carmelitas se congregaron en ese punto para empujar con su presencia a los valientes que subieron antes de acompañarla por la arena.
La playa, momento álgido
La calle Sextante fue como cada año, la puerta a la playa. Con el sol ya puesto y con una tímida luna como testigo, la procesión de la Virgen del Carmen llegaba a su momento culmen. Una marea de personas colmaba la playa hasta la misma orilla por donde la Patrona debía de adentrarse en el agua. Con la vista al horizonte, donde decenas de barcos la esperaban desde el mar, los costaleros elevaron a la Alcaldesa Perpetua al cielo marinero mientras acariciaba las aguas. A su salida, se arrojó una corona de flores al mar en recuerdo de los marineros desaparecidos.
Tras abandonar la arena, la procesión continuó por la Cuesta del Altáir hasta el monumento al Marinero y el Ayuntamiento, donde recibió flores y sentidos cánticos en su honor. En el caso de la Casa Consistorial, fue el coro local 'Brisa Marinera' quien le dedicó unas coplas.
Por la avenida de Andalucía continuó su paso hasta la calle Ancha, donde efectuó una parada en la Cofradía de Pescadores y el restaurante El Marinero. En esta ocasión, vecinos y veraneantes pudieron presenciar un brillante dueto del grupo onubense Mangüara y el cantante 'El Mani'. Las populares letras de Paco 'El Caena', entre otras coplas, sonaron por sentidas sevillanas y fandangos que emocionaron a la multitud.
Con los sentimientos a flor de piel, la comitiva concluyó su recorrido por la calle Lepanto y la Cuesta de los Dolores para finalizar en la Capilla de Nuestra Señora de Lourdes ya bien entrada la madrugada. De esta manera, la Virgen del Carmen espera hasta la próxima salida procesional el 15 de agosto por la ría de Punta Umbría.
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