El coordinador del Instituto, Ángel Yagüe, ha afirmado a Efe que la media andaluza se sitúa en un 9,8 por ciento de los hogares con al menos un activo con todos sus integrantes parados.
Esta cifra se supera en las provincias de Cádiz (11,8%), Málaga (11,2%), Huelva (10,6%) y Granada (9,9%), mientras que en el extremo opuesto se sitúa Jaén, con un 6,9 por ciento de sus hogares con al menos un activo en los que nadie trabaja.
En términos absolutos son las provincias de Málaga (145.100), Sevilla (135.800) y Cádiz (117.300) las que más hogares tienen con todos desempleados.
Del análisis de estas cifras se desprende que de cada cien hogares andaluces en los que todos sus miembros están parados, veintidós son malagueños, veinte sevillanos, casi dieciocho son gaditanos y once granadinos.
Yagüe ha relacionado estos datos con la crisis económica y, en particular, con la caída de la actividad de la construcción porque "no va haber ningún sector que pueda demandar trabajo de forma tan intensiva como la construcción".
El auge vivido durante los últimos años por la construcción, un sector con menor impacto de las tecnologías y capaz de absorber mano de obra de baja cualificación, ha "erosionado" la capacidad de los andaluces de ser productivos y crear empresas, según ha explicado el experto.
Muchos ciudadanos abandonaron sus ámbitos rurales y estudios para "irse a las obras", donde el empleo estaba bien pagado, y en la actualidad resulta "difícil de reubicar y formar con la celeridad necesaria" a estas personas.
A esto se une que el sector industrial "prácticamente ha desaparecido" en la comunidad, y que el sector turístico ha sufrido en el último año una caída de la demanda, por lo que en la actualidad "el panorama es desolador".
Los andaluces cada vez tienen más dificultades para encontrar trabajo debido al deterioro de la situación económica, lo que se evidencia en que en un año se ha duplicado el número de personas paradas que llevaban buscando un empleo entre uno y dos años, y que las que llevan más de dos años paradas han aumentado más de un 50 por ciento.
En los próximos meses es probable asimismo que se produzca un repunte del euribor, que se unirá al aumento de la presión fiscal, tanto por la subida del IVA prevista a mitad de año como por la posibilidad de que los ayuntamientos incrementen el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) debido a la merma de sus ingresos, que "han caído en picado".
Yagüe ha defendido la necesidad de cambiar el modelo económico, pero ha dicho que no es posible hacerlo "de un año para otro", al tiempo que ha apostado por un sistema educativo estable, dado que "no puede estar al albur del partido que gobierne".
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