La presidenta del Parlamento, Marta Bosquet, ha manifestado que tiene intención de presentar en este mes o en octubre a los grupos parlamentarios su reforma global del Reglamento de la Cámara, con el objetivo de que pueda empezar a aplicarse en esta misma legislatura.
En una entrevista con Europa Press, Marta Bosquet ha manifestado que se trata, sin duda, de una reforma "necesaria" y que por ello espera que cuente con el apoyo de todos los grupos, que podrán realizar sus aportaciones. Además, se ha mostrado convencida de que el nuevo Reglamento que surja de esa reforma podría dar tiempo a aplicarlo en esta misma legislatura, porque no se trata de plantear un nuevo texto, sino de una modificación del actual, que requerirá una tramitación de unos seis o siete meses.
Ha expuesto que se trata de una reforma para agilizar la actividad parlamentaria y conciliar "un poco las diferencias" que hay entre el Estatuto de Autonomía y el Reglamento. Ha confiado en que todos los grupos estén de acuerdo porque se trata de "una reforma que viene a mejorar la actividad parlamentaria en beneficio de todos".
En su propuesta de reforma, Marta Bosquet planteará una reducción de los tiempos de intervenciones de los grupos en los debates, porque en algunos casos llegan a ser diez minutos por grupo, como en el caso de las proposiciones no de ley, en una Cámara que cuenta con cinco grupos parlamentarios.
Respecto a si planteará una nueva regulación de las comisiones de investigación, ha expresado que le gustaría que, dentro del marco legislativo, se pudiera articular de alguna manera que las personas que sean llamadas a comparecer en un comisión de investigación y que no estén inmersas en causa judicial tengan la obligación de comparecer y de hablar ante la comisión.
"Hay que dar un paso más allá y que no baste solo con la presencia, sino que también se produzca la intervención", según Bosquet, quien se ha mostrado convencida de que las comisiones de investigación sí "sirven para algo" y son una vía para que los ciudadanos conozcan qué ocurrió con determinados asuntos.
En relación con ese debate sobre la utilidad o no de la preguntas orales que formulan diputados de los partidos que sustentan al Gobierno a los consejeros en la sesión de control de los plenos del Parlamento, Marta Bosquet ha descartado su eliminación de las sesiones de control, porque una cosa es la actividad del grupo y otra la del Gobierno, y los grupos que sustentan al Ejecutivo también tienen "la obligación y derecho de hacer esa actividad de control".
No obstante, ha planteado la posibilidad de que "de alguna manera se pudiera, no limitar, pero sí reducir un poco la participación de los grupos que sustentan al Gobierno" en esa sesión de control de los plenos.
RETOS DEL NUEVO CURSO POLÍTICO
En cuanto al inicio del nuevo curso político este mes de septiembre, la presidenta de la Cámara se ha mostrado convencida de que será "muy interesante", sobre todo, porque a nivel legislativo hay importantes proyectos de ley en tramitación, como el de Tributos Cedidos y el de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía (Lista), mientras que también llegará el proyecto de Ley de Presupuestos andaluces para 2022.
Ha confiado en que todos los grupos tengan altura de miras suficientes, piensen sobre todo en beneficio de los andaluces y no en los intereses "partidistas, con calculadoras electorales en la mano", y que puedan apoyar al menos esas tres importantes leyes.
Teniendo en cuenta que estamos en el último año de legislatura, según Bosquet, será inevitable que los partidos estén en "modo electoral", pero es fundamental que todos tengan "altura de miras, dejen de estar con la calculadora en la mano y miren por los andaluces", sobre todo, en estos complicados momentos de la pandemia del coronavirus.
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