El Gobierno andaluz diseña la ampliación del número de delegados provinciales y quiere hacerlo sin que cueste un euro a las cuentas públicas. Según ha podido saber este diario, gran parte del Ejecutivo apuesta por propios funcionarios de la Administración andaluza para que ocupen ese rol.
Sin embargo, hay una voz que discrepa. Es la de Rocío Ruiz, consejera de Igualdad y militante de Ciudadanos. Ella, durante una videoconferencia con afiliados de la formación naranja, aseguró el pasado miércoles que apuesta por cubrir puestos de delegaciones territoriales de la Junta con “gente de base del partido” naranja, “gente nuestra”, y que “no le pongan como condición que sean funcionarios”.
“Yo quiero elegir a mi equipo. Es importante que estén los delegados provinciales de políticas sociales y puedan contar lo que se hace desde la Consejería para que llegue a todos los pueblos. Voy a luchar para tener a mis delegados”, insistió.
Unas palabras que generaron un importante malestar entre los miembros del Gobierno andaluz. El propio vicepresidente de la Junta y líder de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín, ha salido al paso este jueves del pronunciamiento de Ruiz y le ha acusado de ir “al contrario” del ideario de su propia formación, Ciudadanos. El motivo: “No hay que tener el carné de militante de Cs para asumir una responsabilidad en un Gobierno de Ciudadanos”, ha dicho.
Marín ha defendido que “creemos que los funcionarios públicos tienen una labor importantísima en el ámbito de la administración”, por lo que pueden ocupar el puesto de delegado provincial. “Eso lo compartimos desde Inés Arrimadas -la presidenta nacional de Cs- hasta el último afiliado de esta formación”, ha confesado Marín, quien ha añadido que la consejera de Igualdad “tendrá que dar explicaciones de sus palabras al Gobierno”, no a él en particular por pertenecer ambos a Cs, “porque esto es una decisión del Gobierno, y además se debe a un acuerdo” firmado hace dos años.
Ha agregado que "ha habido una necesidad, que sí comparto con mi consejera y con el resto del Gobierno, de que algunas delegaciones provinciales tenían una carencia importante a la hora de poder sacar adelante una situación como la que estamos viviendo, porque son muchos expedientes los que se están tramitando, y en determinadas áreas, como Medio Ambiente o Educación especialmente, había necesidad de cubrir esos puestos en las delegaciones provinciales".
"Pero hay un acuerdo de PP y Cs de que eso se hiciera con funcionarios públicos", porque "creemos en la capacidad, el mérito, la posibilidad de darle esa participación al conjunto de los funcionarios de esta administración autonómica", según ha apostillado Marín.
Y es que, en definitiva, la consejera onubense, según lo que dijo el miércoles en un encuentro digital con militantes de Ciudadanos, defiende que su intención es estar rodeada de “gente preparada, con mérito y capacidad” pero debe ser “gente nuestra, del partido”. De ahí que ya empezara tiempo atrás a “buscar personas” y, para ello, asegura que “se hicieron entrevistas” para empezar a seleccionar “gente estupenda”. Sin embargo, lamenta que “el proceso se ha parado” y desconoce “que pasará”.
“Yo quiero elegir a mi equipo. Es importante que estén los delegados provinciales de políticas sociales y puedan contar lo que se hace desde la Consejería para que llegue a todos los pueblos. Voy a luchar para tener a mis delegados”, insiste.
Su objetivo es que los delegados provinciales sean “gente del partido” y descarta que puedan ser funcionarios, ya que no existe ahorro. “Yo soy funcionaria y mi puesto lo está cubriendo otra persona. Al final son dos sueldos”, confiesa.
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