El dueño de un cibercafé de Sevilla condenado en octubre de 2016 a tres años de cárcel por abusos sexuales a tres menores ha ingresado en prisión tras serle denegado el indulto solicitado y la suspensión de la ejecución de la pena.
En una providencia del 9 julio aunque notificada hoy a las partes, a la que ha tenido acceso Efe, la Sección Séptima de la Audiencia de Sevilla, da cuenta de la información remitida por la cárcel de Huelva del ingreso en la misma de F.J.R.P., condenado desde octubre de 2016 a tres años de prisión tras un juicio en el que el acusado y la Fiscalía y la acusación particular -que inicialmente solicitaban 16 y 15 años de prisión respectivamente- llegaron a un acuerdo de conformidad.
Según ha explicado a Efe el abogado Manuel Huertas, que representa a dos de las tres víctimas, se alcanzó el acuerdo de conformidad una vez que el acusado aceptó los hechos e indemnizar a los menores y a sus familias con un total de 37.000 euros, y con el fin de "evitarles revivir un episodio que les dejó secuelas".
No obstante, una vez dictada la sentencia y devenida en firma al no ser recurrida por ninguna de las partes, la acusación particular se ha opuesto siempre a todas las peticiones del condenado para suspender la ejecución de la pena y al indulto solicitado, al perseguir que cumpla en prisión los tres años de pena a los que ha sido condenado.
Los hechos sucedieron durante 2013 en un cibercafé del barrio sevillano de Triana que el acusado regentaba y en el que practicó tocamientos a tres menores que entonces contaban 9, 11 y 13 años, aprovechando que acudían al local para jugar con los videojuegos.
Tras el juicio celebrado en la Audiencia de Sevilla en octubre de 2016 y la sentencia condenatoria, el acusado pidió la suspensión de la ejecución de la pena en febrero de 2017 y al serle denegada, recurrió, siéndole desestimada de forma definitiva en enero de 2018, por lo que se le requirió ingresar en prisión el 19 de febrero de 2018, pero al no presentarse se dictó contra él una orden de busca y captura el 19 de marzo.
Paralelamente, solicitó un indulto y la suspensión de su ingreso en prisión mientras se resolvía el mismo, medida de gracia que igualmente le fue denegada y que recurrió en súplica el 23 de marzo.
La acusación particular que ejerce Manuel Huertas se opuso a cada una de las peticiones de suspensión e indulto y solicitó su inmediato ingreso en prisión, que finalmente acaba de producirse
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