Sevilla

Resucitado cierra en Sevilla una Semana Santa con pleno de cofradías

La procesión de El Resucitado cierra hoy en Sevilla una Semana Santa en la que todas las cofradías han podido salir a la calle a pesar de las lloviznas

Publicidad AiPublicidad AiPublicidad Ai Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai

La procesión de El Resucitado cierra hoy en Sevilla una Semana Santa en la que todas las cofradías han podido salir a la calle a pesar de las lloviznas, que sí han conllevado algunos cambios en recorridos y que provocaron que Los Gitanos, en la Madrugá, fuera la única hermandad que no llegó a la Catedral.

La Resurrección ha salido a las 8.30 horas de la Parroquia de Santa Marina y prevé volver a su templo a las 17.15 horas, poniendo así el broche final a la semana grande de Sevilla, en la que miles de personas han llenado las calles desde el pasado Domingo de Ramos.

La semana se ha desarrollado sin incidentes de importancia entre un gran despliegue de seguridad, después de los altercados del año pasado, cuando se produjeron situaciones de pánico por varias avalanchas durante la Madrugá.

Desde que salió la Borriquita el Domingo de Ramos hasta hoy, los visitantes han podido asistir al paso de las más de sesenta cofradías, con las que han salido casi 66.000 nazarenos, de los que unos 12.100 lo hicieron en las procesiones de la Madrugá.

La lluvia ha hecho acto de presencia en varios días, dando su primer aviso el mismo Domingo de Ramos, cuando las precipitaciones de la mañana y el mediodía provocaron que las primeras hermandades retrasaran sus salidas, aunque no impidió que procesionaran todas.

Las nueve cofradías del Lunes Santo salieron a la calle ya sin amenaza de lluvia, al igual que pasó con las ocho del Martes Santo.

El miércoles, ecuador de la Semana Santa, fue el turno de algunas de las hermandades más populares de Sevilla, como la de San Bernardo y la del Baratillo, muy ligadas al mundo del toreo.

El jueves, la jornada más larga de la Semana Santa de Sevilla, que se prolonga en la "Madrugá", retomó la tradición de la mantilla, con las que las mujeres lucen luto por la muerte de Cristo, a la vez que demuestran que esa señal de rigor es compatible con la elegancia.

En la Madrugá, el punto álgido de la Semana Santa sevillana, pudieron procesionar las seis hermandades a pesar de una llovizna, sobre las 7.00 horas, que provocó algunos cambios en recorridos.

La principal afectada fue la hermandad de Los Gitanos, que no pudo ir a la Catedral, ya que la lluvia le sorprendió cuando comenzaba su recorrido oficial y decidió refugiarse en una iglesia y volver a su templo antes de lo previsto.

La lluvia comenzó, a pesar de las previsiones contrarias, cuando estaba esta hermandad en la calle junto a La Macarena y La Esperanza de Triana, mientras que El Gran Poder, El Silencio y El Calvario acababan de terminar su estación de penitencia.

La Macarena decidió continuar con su recorrido y no interrumpió su procesión en ningún momento, mientras que La Esperanza de Triana sí decidió acortar su recorrido de vuelta, después de refugiarse temporalmente en la Catedral de Sevilla.

Ya sin la amenaza de lluvia, las dos Esperanzas llegaron a sus templos entre las 13.00 y 14.00 horas del viernes, entre multitud de gente y lluvias de pétalos.

La lluvia también alteró el final del viernes, donde dos hermandades, Montserrat y la Sagrada Mortaja, se tuvieron que refugiar en la Catedral para esperar que cesase y poder continuar el camino a sus sedes.

La sobriedad del Sábado Santo, con el Santo Entierro y la Soledad de San Lorenzo, entre las cinco cofradías salieron, anunciaba ya ayer la conclusión de una Semana Santa que cierra hoy La Resurrección.

Envía tu noticia a: participa@andaluciainformacion.es

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN