Con motivo de la celebración del Día de las Personas Sin Hogar el próximo domingo 26 de noviembre y cuyo lema es ‘Somos personas. Tenemos derechos. Nadie sin hogar’, Cáritas Diocesana de Cádiz celebró ayer, con la colaboración del Ayuntamiento de Chiclana, una mesa redonda, que abordó con diferentes agentes sociales la realidad de este colectivo en situación de exclusión social. Así, en el encuentro estuvieron presentes el delegado municipal de Servicios Sociales, Francisco José Salado; el responsable del Programa de Personas Sin Hogar y Vivienda de Cáritas Española, Enrique Domínguez; así como personas participantes de los proyectos de Personas Sin Hogar de Cáritas. Además, la mesa estuvo moderada por el secretario general de Cáritas Diocesana de Cádiz, José María Espinar.
Hay que destacar que la negación del ejercicio de los derechos universales de la persona fue el tema central de la mesa redonda. En este sentido, la campaña de 2017 de Cáritas quiere reflexionar sobre la necesidad de que las personas sin hogar puedan ejercitar sus derechos como ciudadanos, es decir, el ejercicio del derecho a la vivienda, a la salud y al empleo. De esta forma, los principales objetivos son sensibilizar a la sociedad sobre la realidad de las personas sin hogar; denunciar y cuestionar con fuerza el modelo socioeconómico actual, generador de descarte y expulsiones, y que tiene su mayor impacto en aquellas personas en situación de mayor vulnerabilidad y exclusión, las personas sin hogar; y proporcionar herramientas para la animación-sensibilización, denuncia e incidencia, para que así puedan profundizar en la realidad de las personas en situación de sin hogar.
Así, hay que recordar que en este 2017 se cumplen 25 años del comienzo de la celebración de la campaña de las Personas Sin Hogar que busca sensibilizar a la sociedad sobre la realidad de exclusión de más de 40.000 personas sin hogar existentes en España. Además, España es el segundo país de la Unión Europea donde más ha crecido la desigualdad desde que estalló la crisis. Así, 11,7 millones de personas están afectadas por distintos procesos de exclusión social, y 5 millones de personas se encuentran ya afectadas por situaciones de exclusión severa. Y, por otro lado, la tasa de riesgo de pobreza en 2016 se situó en el 22,3 por ciento de la población, frente al 22,1 por ciento registrado en 2015.
En este sentido, Francisco José Salado destaca “la gran labor que realizan distintas entidades sociales como Cáritas Diocesana, que trabajan por ayudar a las personas que peor lo están pasando”. “Aunque en Chiclana, poco a poco, está mejorando la situación de las familias, aún existen muchas unidades familiares sin apenas recursos económicos y a las que debemos seguir ayudando para salir adelante en estos difíciles momentos”, expresa el delegado municipal de Servicios Sociales, quien confía en que “podamos continuar con esta mejoría y durante los próximos meses descienda considerablemente el número de personas con problemas de exclusión social”.
“Con el objetivo de trabajar para acabar con esta situación, todos los agentes sociales y administraciones debemos ir juntos, ya que se trata de un problema de todos y por tanto requiere del esfuerzo de todos. Por ello, desde este convencimiento estamos desarrollando diversas políticas sociales en favor de todo aquel que lo necesita, ya sea en materia de vivienda, educación, familia e infancia, salud o empleo”, indica el delegado municipal de Servicios Sociales, quien recuerda que “este equipo de Gobierno ha aprobado una Ordenanza sobre ayudas económicas a familias, ha firmado convenios con entidades sociales y empresas que ofrecen servicios básicos de luz, agua y gas, para evitar sus cortes en caso de impago por falta de recursos, ha puesto en marcha políticas de empleo, un Plan Municipal de Vivienda, ayudas al alquiler, rehabilitación de viviendas y pago de hipoteca, va a construir 18 nuevas VPO en La Cucarela, etcétera...”.
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