Si es usted uno de los más de 270.000 empleados públicos que engrosan la plantilla de la Junta de Andalucía está entonces de enhorabuena. La próxima nómina que cobre (la de julio, que le ingresarán a finales de mes) incluirá ya la subida salarial del 1% que contemplaban los Presupuestos Generales del Estado de este año para el sector. Como las cuentas públicas nacionales se enredaron en la refriega política y no han aparecido en el BOE hasta el 28 de junio es ahora cuando la plantilla de la Administración regional puede por fin ver incrementado su sueldo. Y no sólo en lo correspondiente a julio. También se cobrarán con carácter retroactivo los atrasos de los seis anteriores desde que arrancó el año, de enero hasta junio. La cantidad será pues el equivalente a la subida mensual que corresponda a cada trabajador por su categoría laboral multiplicada por siete.
El anuncio se lo había reservado la propia presidenta de la Junta, Susana Díaz. Lo deslizó este jueves en la respuesta a la pregunta de control amable al Ejecutivo que le formuló el portavoz del PSOE, Mario Jiménez. La cuestión versaba sobre el grado de cumplimiento de los programas financiados con fondos europeos, pero la jefa del Ejecutivo andaluz encontró la pasarela perfecta para lanzar la buena nueva. El abono a la plantilla es posible porque la Junta había reservado ya una partida de 123 millones. Andalucía “cumple”, se encargó de recordar la presidenta, y puede ahora responder a los atrasos porque es previsora y había hecho los deberes. El comentario no era gratuito.
El mensaje subrepticio era un clásico, más en tiempos de confrontación con el Ministerio de Hacienda y en vísperas de la reunión hoy del Consejo de Política Fiscal y Financiera en la que Andalucía prevé plantarse y dar un no rotundo al nuevo objetivo de déficit del 0,4% que pondrá Cristóbal Montoro sobre la mesa. Díaz tiró de solvencia de su aparato administrativo para a continuación recordar que eso es así pese a las obstáculos que encuentra del Gobierno central en forma de pérdida de inversiones, de un modelo de financiación autonómica que le escamotea mil millones anuales y del último supuesto atropello de no permitir a la Junta que alcance el listón de déficit que cree que necesita para prestar los servicios esenciales a sus más de 8 millones de habitantes.
Hasta 500 euros anuales
¿En cuánto se traduce la subida salarial? Depende por lógica de la nómina de cada empleado público. Los cálculos que facilita la Consejería de Hacienda y Administración Pública hablan de entre 170 y 500 euros más al año. Pero como ahora lo que se recibe es la cantidad correspondiente a siete meses la próxima nómina llegará mejorada en entre 100 y 200 euros por trabajador.
El camino estaba pues allanado para que Díaz presumiera de gestión pese al diluvio de agravios que asegura le llueven desde Madrid. La presidenta incidió una y otra vez en que medidas como el reintegro completo de lo atrasado a los funcionarios equivale a “devolver, recuperar y ampliar derechos en Andalucía” tras los tijeretazos que la “austeridad a ultranza” de Mariano Rajoy impuso en el último quinquenio. El discurso entroncaba con el argumentario que se seguirá escuchando en los próximos meses: la región cumple con todas las imposiciones del Gobierno central y a cambio tan sólo recibe hachazos.
La pregunta le servía además a Díaz para sacar pecho tras la reciente visita a Sevilla de Pierre Moscovici, el comisario de Asuntos Económicos que alabó la ejecución andaluza de los fondos de la Unión Europea.
El PP reta a cumplir lo de las primarias
El PP tiró de ingenio parlamentario y logró sacar adelante una iniciativa con la que anima al Gobierno autonómico a aprobar fondos reembolsables para jóvenes de menos de 35 años, que recibirían créditos de hasta 24.000 euros que podrán destinar a formación, inserción laboral o emprendimiento. Esa medida es un calco de lo que propuso Díaz durante las primarias, por lo que el PSOE tuvo que votar por fuerza sí.
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